JAVIER GASTON A LOS CONCEJALES, POR LA EMERGENCIA ECONOMICA«No sé puede andar por la vida diciendo cualquier cosa. Ustedes han tenido tiempo para estudiar el pedido que hemos hecho, los invito a que resuelvan”
1 marzo, 2024
Con una contundencia y sin medias tintas (“no esperábamos que nos criticara o reclamara tanto, pensamos que sería un discurso más protocolar”, reconoció ante este portal un concejal de la UCR) el intendente Javier Gastón reclamó repetidamente ante el Concejo Deliberante la aprobación de su pedido de emergencia económica. Lo hizo en el marco institucional de la apertura de sesiones ordinarias 2024 del Honorable Concejo Deliberante de Chascomús.
Fueron treinta y cinco minutos que no tuvieron desperdicio. Se podrá coincidir o no, pero nadie podrá decir que el discurso del intendente Javier “Chapa” Gastón, brindado en la apertura de las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante de Chascomús, pasó desapercibido. Todo lo contrario: las palabras del jefe comunal fueron directo a cada uno de los concejales, pero en particular a los nueve que integran los dos bloques opositores (UCR por un lado; Pro por el otro).
Gastón resaltó con claridad y brindando diversos ejemplos puntuales, el tremendo impacto negativo que la actual crisis económica y social –profundizada en los últimos dos meses por las medidas del gobierno nacional- tiene en las finanzas municipales. Hizo un llamamiento directo a los concejales para que aprueben su pedido de emergencia: “La declaración de emergencia que solicité es una adhesión a leyes provinciales y se fundamenta en la realidad nacional. Chascomús no es una isla. Tenemos una profunda crisis social y económica. Los ajustes de los últimos meses fueron brutales. Las devaluaciones impactan de lleno en los municipios. ¿Se entiende por qué la urgencia de la emergencia? Declararla es una herramienta preventiva para afrontar el aumento que se prevé en la demanda”, dijo en distintos momentos Gastón, y cosechó sus primeros aplausos de la barra cuando dejó flotando en el aire del mediodía de este viernes 1 de marzo, esa pregunta.
Flanqueado por el presidente del Concejo Deliberante –el radical Andrés Sanucci- el intendente resaltó que el panorama que les narraba a los concejales, era una realidad que repiten y padecen los 135 intendentes de la provincia de Buenos Aires. No obstante, no pasó desapercibido que hizo mención a sus colegas de Tandil, de San Cayetano y de Mar del Plata, todos municipios gobernados por Juntos por el Cambio (o lo que de ello queda).
DETALLES BRINDADOS POR EL INTENDENTE
Para graficar las complejidades económicas que la administración afronta a diario, indicó Gastón que una luminaria tenía un costo de cinco mil pesos en diciembre, y hoy se paga por ella veinte mil. O recordó lo que ya publicó en su momento este portal: “la misma licitación de medicamentos e insumos hospitalarios que en diciembre nos salió 2,9 millones de pesos, a mediados de enero costó casi veinte millones de pesos; ¿Hace falta que les diga que los ingresos en ese período, no subieron en ese mismo porcentaje?”.
El alcalde también puso el centro en el hospital municipal, destacando que es el único efector de salud del distrito, y hablando del notable incremento del número de personas que asisten a sus instalaciones: “Hay un fuerte incremento en la atención en el hospital. La suba fue del 50% más de enero 2023 a enero 2024. Hay una sobre demanda en el hospital. Tenemos que seguir con la descentralización y continuar con esa política. Pero la realidad es sumamente compleja”.
LA REALIDAD ADMINISTRATIVA Y ECONOMICA
Javier Gastón –escuchado desde la primera fila por su padre, quien fuera el primer intendente de la recuperada democracia en 1983- reivindicó sus ocho años de gestión resaltando el orden administrativo y cuestionando (sin hacer nombres propios) a los gobiernos que lo precedieron, todos radicales. “Tenemos que seguir profesionalizando la atención y la administración municipal. En ocho años garantizamos una Municipalidad ordenada, transparente y eficiente, con cuentas equilibradas. Esta no es la primera crisis que atravesamos. No gastamos más de lo que ingresa, eso es equilibrio fiscal”, señaló.
En este eje de su discurso, resaltó además que “hemos cancelado todas las deudas y cumplido con todos los proveedores, la mayoría de los cuales son locales”, con lo cual garantizar eso implica una inyección económica constante y mensual de recursos en el circulante de dinero en la ciudad. Seguramente este resaltado del intendente no fue casual, ya que persiste en la memoria popular los históricos atrasos que padecían los proveedores municipales con otras gestiones, cuando la mercadería que se entregaba o los servicios que se prestaban, se cobraban a sesenta, noventa o más días.
OBRAS PUBLICAS, UNA DE LAS GRANDES PREOCUPACIONES
El intendente brindó un detalle de las distintas obras que se encuentran paralizadas o no iniciadas, sobre todo por la falta del envío de los fondos que debe proveer el estado nacional. Reiteró que esta parálisis de la obra pública golpea en todo sentido, sobre todo generando desocupación.
En línea con el gobernador Axel Kicillof, cuestionó la reciente decisión del presidente Milei de eliminar el Fondo de fortalecimiento fiscal: “su desaparición compromete aún más todo. Lograron instalar que el estado no sirve. Hay muchos que colaboraron con eso. Nosotros no estamos en ese grupo”, dijo con claridad Javier Gastón.
En relación a las obras paralizadas, entre otras hizo mención al pavimento del barrio 30 de Mayo, y a las reparaciones de las plantas de bombeo de las calles Escribano y Neuquén, como también a la continuidad de la nueva planta depuradora, la denominada “cloaca máxima”, el desmantelamiento del actual basurero municipal y la conformación del denominado “ecoparque”.
LA SITUACION DE LOS EMPLEADOS MUNICIPALES
Tal vez una de las cuestiones más sensibles en la actualidad, y uno de los temas que más reclamos genera al actual gobierno local, es la referente a la situación de los empleados municipales, que al igual que en el resto de las comunas, perciben salarios excesivamente bajos. Sobre esto, habló el intendente y dijo: “queremos garantizar los puestos de trabajo municipales y mejorar sus ingresos. Resolvimos actualizar la ayuda escolar. Abonaremos una segunda parte en este mes de marzo, para completar lo que ya pagamos hace una semana. Quiero detenerme en esto y que quede claro que las asignaciones familiares que perciben los empleados surgen del erario comunal. Pagamos con recursos nuestros”, lo que generó otro momento de aplausos desde la barra.
En la misma línea, también fue aplaudido el intendente cuando dijo “que quede claro: no son los municipales la variable de ajuste, como algunos quieren decir o hacer creer”.
MAS SOBRE LA EMERGENCIA
Ante algunos concejales opositores que se mostraron algo incómodos en sus bancas, el intendente retomó sus reclamos hacia el cuerpo por la falta de aprobación de su pedido de emergencia económica. Lo hizo sin disimulos y sin medias palabras: “¿me pueden decir sinceramente que tiene de “superpoder” lo que se está pidiendo? La anterior emergencia la usé una sola vez, que fue para renegociar el contrato que permitió hacer la sala de pediatría, en febrero de 2020”.
Esta afirmación del intendente no fue evidentemente casual, y motivó otro momento de aplausos del público: es que la referencia a la sala de pediatría remite de forma inexorable en la memoria colectiva, a la desidia y desmanejo del gobierno de la ex intendenta Denot, en la administración de los fondos que para su construcción girara el entonces gobernador Solá en 2007, y que motivó que pasaran casi quince años para que la obra pudiera terminarse.
Siempre refiriendo a su reclamo por la falta de aprobación de la emergencia económica, Javier Gastón resaltó: “esa emergencia del 2020 sirvió también para que la provincia se hiciera cargo de la deuda por la rifa de las cooperadoras escolares”. Aquí, también recordó Gastón los “errores” de gestiones radicales (en este caso la del ex alcalde Juan Carlos Salas) que costaron deudas harto millonarias, las que fueron finalmente absorbidas por el estado provincial, y pusieron a Chascomús al borde de la quiebra.
Dijo también Javier Gastón. “La emergencia es para cuidar los recursos de los vecinos. Para las viviendas del San Luis y el 30 de Mayo, que no se iniciaron porque ya hay una diferencia entre el presupuesto y la oferta y entonces la empresa que adjudicó la obra no puede iniciar trabajos. La emergencia nos permitirá que el ministerio de hábitat provincial reconozca esa diferencia y la cubra. ¿Se entiende que no podemos frenar la construcción de viviendas?”.
Para cerrar, y antes de despedirse, el intendente tuvo un último párrafo destinado de forma directa a los concejales: “no sé puede andar por la vida diciendo cualquier cosa. Ustedes han tenido tiempo para estudiar el pedido que hemos hecho, los invito a que resuelvan”.