Fútbol - Historia repetidaGallardo, el karma de Boca y de Macri

Fútbol - Historia repetida

Gallardo, el karma de Boca y de Macri

24 octubre, 2019 Desactivado Por Zenón Rodríguez de la Cárcova

 

El River Plate de Marcelo Gallardo sigue haciendo historia. Tras un nuevo triunfo ante Boca Juniors –su rival de toda la vida- el festejo millonario le permite dejar a los auriazules en el camino una vez más, y prepararse para jugar una nueva final de la Copa Libertadores de América.

El ya mítico y joven entrenador millonario, justifica a pleno las razones por las cuales está previsto que en un futuro cercano, eleven una estatua en su honor. Es que el “Muñeco” Gallardo no deja de sumar páginas a su dorada historia como entrenador de River.

Apodado como Napoleón, Gallardo no conoce de Waterloo, si de enfrentar a Boca Juniors se trata. La historia parece recomenpensarlo: todo lo que perdió en su carrera como jugador profesional ante Boca Juniors, lo recupera ahora desde el banco de suplentes.

Gallardo disputó como director técnico cinco series de mano a mano con su rival de toda la vida. Increíblemente, el entrenador ganó absolutamente todas.

Cuatro de esos cinco enfrentamientos fueron por copas internacionales, en tanto que el otro mano a mano que disputado fue por la Supercopa Argentina.

Otro mérito que puede ostentar Gallardo es que los arqueros de sus equipos, nunca sufrieron goles en su valla cuando les tocó jugar en el estadio Monumental.

El impacto de la historia repetida de Marcelo Gallardo y River Plate festejando ante Boca Juniors, tiene de forma inevitable su correlato en lo político. Boca Juniors es el club identificado con Mauricio Macri, y allí gobierna desde hace años el macrismo. Como nunca antes, ahora los seguidores del presidente del país, enfrentan la muy firme posibilidad de perder la conducción del club ante la oposición. En la entidad de la ribera hay elecciones en diciembre, y la posible victoria de Jorge Amor Ameal es cada vez más factible.

Ameal es un ex presidente, identificado políticamente con el peronismo, y detrás de su candidatura se alinean distintas figuras de la política nacional que pertenecen al Frente de Todos

Seguramente sin proponérselo, Marcelo Gallardo y sus repetidos festejos ante el Boca de Daniel Angelici y Mauricio Macri, ha hecho mucho por un posible triunfo opositor en la política xeneize, en los comicios que se darán en diciembre del 2019.

El primer mano a mano fue por la Copa Sudamericana del 2014. En aquella ocasión se enfrentaron en semifinales, empatando sin goles en cancha del xeneize y luego ganando River como local por dos a cero, la noche del penal atajado por Barovero a Emanuel Gigliotti, entonces delantero boquense.

Luego, vino el cruce por los octavos de final de la copa Liberadores 2015. Fue la serie que terminó de la peor manera, con el escándalo del gas pimienta. Cuando los jugadores de River se disponían a salir al campo de juego de la Bombonera para disputar el segundo tiempo fueron agredidos por la parcialidad local (el primer tiempo estaba 0 a 0). Esto derivó en la suspensión del encuentro y posterior descalificación del Xeneize.

Tras aquello, el River de Gallardo eliminó a Boca de la Supercopa Argentina, en la final que se disputó en Mendoza; los millonarios ganaron por dos a cero con goles de Gonzalo Martínez e Ignacio Scocco.

Gallardo no detuvo allí su costumbre de festejar ante Boca. Llegó la mítica e histórica final de la Copa Libertadores de América 2018. En el partido de ida (que se pospuso un día por la fuerte lluvia que azotó a la Capital Federal), los dirigidos por Marcelo Gallardo demostraron carácter para reponerse de estar en dos ocasiones abajo en el marcador y se llevaron un valioso empate de La Bombonera. Ramón Abila y Darío Benedetto fueron los autores de los goles para el equipo comandado por ese entonces por Guillermo Barros Schelotto. Lucas Pratto y Carlos Izquierdoz, en contra, los tantos de la visita.

La revancha, la final soñada, fue en el Santiago Bernabeú (Conmebol decidió trasladar la vuelta de la final a Madrid tras la agresión que sufrió el plantel de Boca en las inmediaciones del Monumental). Luego de comenzar abajo en el marcador debido a un tanto de Darío Benedetto, los de Núñez volvieron a mostrar su carácter al nivelar el marcador con un gol de Lucas Pratto y llevar el partido al suplementario.

River se quedó con la definición más importante de la historia entre ambos equipos gracias a las conquistas del colombiano Juan Fernando Quintero y Pity Martínez. Ambas fueron en el segundo tiempo del suplementario.

Así, se llegó a la por ahora última instancia de alegrías de Gallardo, con la semifinal de la Copa Libertadores 2019. A diferencia de lo sucedido pocos días antes en el torneo local, el cauteloso planteo que propuso Gustavo Alfaro no tuvo resultado. River fue ampliamente superior y se quedó con el primer compromiso gracias a las apariciones de Rafael Santos Borré -un penal vía VAR-y Nacho Fernández.

La revancha en la Bombonera fue el único encuentro en el que cayó el equipo conducido por Gallardo, sin embargo sirvió para la clasificación a una nueva final. Jan Hurtado marcó el único tanto del partido a los 35 minutos del segundo tiempo en un duelo de bajo nivel de ambos equipos. Ya había festejado dos veces en el Monumental, una en Madrid y ahora completó el cartón: en La Bombonera.