El portal de noticias “Agencia Nova” publicó en las últimas horas una nota que no pasó desapercibida en ámbitos políticos: la sede partidaria del PJ de la provincia de Buenos Aires (que comparte edificio con el PJ platense) tendría el servicio de gas cortado desde hace meses por parte de la empresa Camuzzi. A esto se agregaría el retiro del medidor de luz por parte de la empresa Edea.

Luis Lugones, presidente del PJ de la ciudad de La Plata

La publicación periodística –que tuvo amplia repercusión el fin de semana- amerita algún tipo de explicación y/o aclaración por parte de las autoridades partidarias.

Vale recordar que el PJ provincial tiene hoy como presidente nuevamente a Gustavo Menéndez; el intendente de Merlo retomó la conducción a mediados de diciembre, reemplazando a quien había sido su sucesor, el jefe comunal de Esteban Echeverría Fernando Gray.

En cuanto al PJ de la ciudad de La Plata, tiene como presidente al histórico dirigente peronista Luis “Lucho” Lugones.

De acuerdo a lo que publica el portal Nova, la sede partidaria ubicada en 54 entre 7 y 8 “… se encuentra en estado actual de total abandono, suciedad, ratas que pululan por el lugar, baños que dan asco por el nivel deplorable de olores nauseabundos”. En dicha publicación se afirma que la deuda por facturas de luz impagas asciende a los setecientos mil pesos aproximadamente. En cuanto a la deuda de gas natural, también sería cuantiosa. Es válido recordar además que en la planta alta del edificio funciona el histórico restaurante del PJ, que recibe comensales a diario, atendido desde siempre por un conocido afiliado del peronismo, querido y apreciado por todos los sectores internos, pero al que ahora se estaría intimando desde el PJ platense, a que abandone el lugar.

La publicación –que obviamente debe tener sus interesados en que se difunda- encierra sin embargo dos datos centrales, que merecen una rápida desmentida y/o aclaración por parte de las máximas autoridades partidarias distritales y provinciales, y es sin duda alguna lo referido al estado de deuda de servicios básicos y esenciales, como la luz y el gas.