El primer monumento a los payadores en el mundo, se inauguró un 20 de noviembre de 1999. Fue en Chascomús, provincia de Buenos Aires. Se cumplirán ahora veinte años de aquel hecho hasta ese momento inédito, que luego con el transcurrir del tiempo fuera imitado en distintos lugares del país y de naciones vecinas.

Marta Suint y José Curbelo, payadores padrinos del monumento

En países como Argentina y Uruguay, el culto de la payada sostenido por payadores que defienden a ultranza el género de la improvisación, tiene un particular e inquebrantable arraigo. No es casual esto: el día del payador en nuestro país se recuerda todos los 23 de julio, precisamente por recordarse ese día de 1884. ¿Qué pasó en esa histórica jornada?: se dio una memorable payada entre el oriental Juan Nava y el argentino Gabino Ezeiza, en la localidad uruguaya de Montevideo.

En Chascomús, la iniciativa del payador Juan Alberto Lalanne, hizo que la ciudad de la laguna quedara para siempre como el primer lugar en el mundo donde se erigió un monumento, a manera de homenaje, a los payadores. El mismo fue primeramente ubicado en la esquina de Escribano y Alvear, la denominada “esquina gaucha” de la ciudad de la laguna; con los años, ese monumento fue reubicado a pocos metros de su lugar original. Allí se eleva orgulloso, ese trabajo autoría del fallecido escultor oriundo de la ciudad de Magdalena, Gustavo Rodríguez.

Desde aquel 20 de noviembre de 1999, veinte años han transcurrido. Ante el vigésimo aniversario, en el Museo Pampeano de Chascomús (otro orgullo que atesora tradición y recuerdos a la orilla del espejo lacustre) una gran fiesta fue confirmada.

Una decena de payadores de renombre internacional están confirmados para esa fecha; entre otros sobresalen Marta Suint y el uruguayo José Curbelo, quienes son padrinos del monumento del que se cumplen dos décadas de su inauguración y que recientemente tuvieron reconocida presentación en las Islas Canarias, en el viejo continente. Pero estarán también el reconocido payador lezamense Aldo Crubellier; el payador patagónico Saúl Huenchul; el payador de la ciudad de Las Flores Pablo Solo Díaz; el balcarceño Cristian Méndez; Emanuel Gabotto de Dolores y David Tokar de San Vicente (quienes recientemente se lucieron en Puerto Rico); y el payador de San Vicente Luis Genaro. Junto a todos ellos, estará naturalmente también el payador anfitrión y uno de los impulsores de la creación de este monumento: el chascomunense Juan Alberto Lalanne, quien en su doble condición de payador y ventrílocuo estará acompañado por Julián.

En la propuesta que se puede anticipar será garantía de amplia convocatoria de público y que cuenta con el auspicio y el acompañamiento de la Municipalidad de Chascomús, se podrá disfrutar también de las danzas folclóricas a cargo del reconocido grupo de baile chascomunense “Sencillito y de Alpargatas”, dirigido por la profesora Daniela Giribaldi.

A lo largo de los años, distintos monumentos a los payadores se han erigido. Son los casos, sólo por citar algunos, del que se puede ver en la bonaerense ciudad de Castelli, en el barrio de Parque Leloir en el distrito de Ituzaingó, o en la costera ciudad de San Clemente (en el Partido de La Costa).

Sin embargo, el primero del mundo fue en Chascomús. Veinte años atrás. Y el próximo 23 de noviembre, se festejará su nuevo aniversario.