Nació en Coyoacán el 6 de julio de 1907 siendo la tercera hija del fotógrafo Guillermo Kahlo, un inmigrante alemán nacionalizado mexicano y de Matilde Calderón.

A los 6 años contrajo poliomielitis, por lo que estuvo nueve meses en cama dejándole como secuela una pierna bastante más delgada que la otra. La limitación motriz, así como las constantes operaciones y tratamientos médicos, hicieron que Frida no pudiera relacionarse normalmente con otros niños.

En 1922 ingresó a la prestigiosa Escuela Nacional Preparatoria de Ciudad de México, siendo su interés, en ese momento, la medicina.Tres años más tarde, sufrió un grave accidente de tránsito cuando un tranvía arrolló el autobús en el que viajaba. Su columna vertebral se rompió en tres partes y sufrió múltiples fracturas.

Desde ese momento, fue sometida a un sinnúmero de operaciones quirúrgicas y a utilizar corsés de yeso y aparatos de estiramiento. Tras el accidente, Frida trató de moverse lo menos posible para ayudar a la sanación, por lo que la pintura empezó a cobrar un lugar central en su vida. Su larga recuperación fue el contexto apropiado para comenzar a pintar de manera constante, creando, en 1926 su primer autorretrato al óleo.

Por esos años, Frida comenzó a frecuentar ambientes políticos, artísticos e intelectuales. Solía concurrir a las reuniones del Partido Comunista de México donde conoció al gran amor de su vida, el pintor Diego Rivera, con quien se casó en el 29. Su hogar en Coyoacán se convirtió en un lugar de encuentro de grandes figuras artísticas, como el caso de la cantante Chavela Vargas, que llegó a vivir un tiempo con ellos. Durante su exilio en México, el líder comunista León Trotsky vivió en la casa de Frida con quien tuvo un romance poco tiempo antes de ser asesinado por un stalinista.

El reconocimiento artístico a su obra se fue incrementando, especialmente en Estados Unidos donde participó en importantes exposiciones colectivas en Nueva York, Boston y Filadelfia. En 1953, se organizó en México la única exposición individual durante la vida de Frida que, con su salud muy deteriorada, llegó a la inauguración en ambulancia e instaló una cama en el centro de la galería donde se recostó para presenciar el evento.

Ese mismo año le amputaron una de sus piernas por debajo de la rodilla, lo que la sumió en una gran depresión hasta que una neumonía acabó con su vida.

(Fuente: Perfil)