Lo llaman el Triángulo Dorado. Es una zona montañosa en donde confluyen tres estados mexicanos cuyos nombres están hoy ligados al narco: Sinaloa, Chihuahua y Durango. En esta última entidad, las tropas del Cártel de Sinaloa se exhibieron impunes y a plena luz del día, patrullando sus calles.

“Búscate un Escorpión, arriba Durango”, gritan al menos medio centenar de hombres fuertemente armados y vestidos con ropa táctica.

El Cártel de Sinaloa tomó el estado para establecer un santuario de protección para sus líderes, quienes se pasean libremente por las calles o partes serranas.

Esta no es la primera ocasión en que exhiben su poderío. El pasado 6 de febrero se hizo viralizó un video de los sicarios de Ismael “El Mayo” Zambada dando muestra de su cohesión y poder letal que aún mantienen.

En las grabaciones se aprecia a un grupo de sujetos fuertemente armados, patrullando las calles del municipio de Canelas, Durango.

En dicho estado opera la célula criminal de Los Cabrera, brazo armado del Cártel del Pacífico, encabezado por José Luis Cabrera Sarabia. Este grupo criminal se ha asentado bajo la protección de diversas autoridades estatales.

Según muestran oficios de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el brazo armado del Cártel de Sinaloa recluta menores de edad para el sicariato. En 2016 se detectó que Los Cabrera habían enrolado a 29 niños y jóvenes para la comisión de delitos federales como el trasiego de droga, ejecuciones, cobro de piso y extorsión.

Recientemente, Felipe Cabrera Sarabia, “El Ingeniero” o “El señor de la sierra”, —hombre de confianza de Joaquín El Chapo Guzmán Loera en Durango y fundador de Los Cabrera—, se declaró no culpable de narcotráfico ante un juez de Chicago, Estados Unidos.

(Fuente : Infobae)