Walz, de 60 años, es un exeducador que preside la Asociación de Gobernadores Demócratas. Previamente fue miembro durante 12 años de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde su perfil se mostró atractivo para votantes rurales y moderados.

Desde el partido demócrata apuntan a que este detalle, sumado a su condición de veterano militar y propietario de armas, ayude al binomio a atraer a los votantes blancos de clase trabajadora que en el último tiempo se volcaron a favor de Trump.

La semana pasada, Harris se aseguró la nominación presidencial demócrata. Fue la única candidata que se presentó ante los casi 4.000 delegados que, durante cinco días, debían designar mediante sufragio electrónico a la postulante presidencial de su partido.

«Me siento honrada de ser la aspirante demócrata a la presidencia de Estados Unidos», expresó la actual vicepresidenta, de 59 años, tras obtener el apoyo de más de la mitad de los delegados en el segundo día de la maratónica votación.

En las dos semanas transcurridas desde que el presidente Joe Biden anunció que no se presentaría a la reelección, Harris obtuvo el control total del partido. Ningún otro demócrata dio un paso al frente para desafiarla, y Harris se convertirá en la primera mujer negra y originaria del sur de Asia en aspirar a la jefatura del Estado.

Fuente: Minutouno