Derivarían pacientes a municipios del interior Resistencia de algunos intendentes
23 junio, 2020
Si bien el gobierno de Axel Kicillof aprovechó el tiempo de la cuarentena para aumentar el número de camas de terapia intensiva y así hacer frente al aumento de casos de Covid-19 en la provincia, el ritmo de contagios anuncia un panorama extremo y por eso, su administración se adelanta y comienza a pedir ayuda.
De esta forma, a poco de anunciar la vuelta de la fase 1 para la zona del AMBA, el gobierno bonaerense les pidió a varios municipios del interior la posibilidad de recibir pacientes derivados, para de esta forma descomprimir los hospitales más desbordados. Actualmente, la provincia acumula 20 mil contagios y un total de 500 fallecidos, de los cuales el 90% se dieron en el Conurbano.
En efecto, la propuesta del gobierno de la provincia sería que los municipios tomen pacientes de la zona. Por ahora, el clima en los municipios no parece ser el mejor, pese a que existe un convenio entre Provincia y los intendentes, que destina $2 mil pesos por paciente con Coronavirus destinados a centros extrahospitalarios.
Eso al menos se apreció en las palabras del intendente de Tandil, Miguel Lunghi, quien ya viene de algunos cruces con la gestión de Kicillof.
“Soy un ser humano pero tengo que cuidar a los tandilenses y si tengo Covid-19 tengo que estudiar la curva de ascenso para considerar las camas disponibles para potenciales pacientes locales”, dijo Lunghi en diálogo con El Eco.
El intendente nunca le dijo que “No” a la provincia, pero tampoco le dijo que “sí”. Además, se mostró preocupado porque –según los datos locales- existe al menos 45 internados por vías respiratorias todos los años entre junio, julio y agosto. “Con esta nueva patología, vamos a entrar en un temor terrible”, dijo.
“Vamos a hacer las cosas bien y defender al máximo a todos los tandilenses para que no les falte nada, y si tenemos la desgracia que algún contagiado tenga que ir a terapia, tenga la cama el tandilense”, priorizó el jefe comunal.
Muy diferente fue la postura del intendente de Bahía Blanca, Héctor Gay, que ofreció a la provincia la disponibilidad de camas para ayudar a descomprimir hospitales colapsados. “Hay más de 100 camas para utilizar”, dijo el jefe comunal la ciudad que se encuentra en Fase 4 del distanciamiento social, con solo 14 casos activos.
Según lo que pudo saber este portal, lo que el gobierno de Axel Kicillof le pide a los municipios que se encuentran en fase 5 y tienen la disponibilidad de los hospitales, no es recibir pacientes del Conurbano, sino más bien de la zona propia de cada localidad.
«Las derivaciones pensamos entre municipios cercanos. No tiene mucho sentido derivaciones desde el conurbano a municipios del interior por ejemplo. Hay complejidades en el traslado de pacientes graves qué hay que tener en cuenta. La idea es hacer lo que se pueda pero con criterio y con cuidado.
“Hace dos meses aproximadamente se realizó una reunión de los referentes de zona VIII con autoridades del ministerio de salud, allí ya se esbozó la posibilidad, que si el sistema de salud se colapsa se van a derivar pacientes a otros efectores de salud locales o regionales», aseguraron desde el ministerio que dirige Daniel Gollan.
Según los datos del gobierno bonaerense, en estos tres meses de pandemia y cuarentena, la provincia pudo avanzar en la “recuperación del sistema sanitario”. Eso se tradujo en un aumento de 31% de las camas de terapia intensiva en 40 municipios que integran el AMBA.
Cuando Kicillof asumió, el pasado 10 de diciembre, en esa región solo había unas 2590 camas críticas. En los meses de cuarentena, el gobierno aprovechó para reforzar los hospitales: ese número ahora es de 3757 de camas.