Exiliado en el 2001, tras el "que se vayan todos"¿Quién es Marcos Mauro, el zaguero argentino que logró ascender en el fútbol español con el Cádiz?
13 julio, 2020
Marcos Mauro es el nombre y apellido de un joven argentino, que es uno de los zagueros centrales del Cádiz, equipo del sur de España que acaba de ascender a la primera división ibérica, categoría en la que militará a partir de la próxima temporada. El club de camiseta amarilla tiene una rica historia, y a lo largo de los años se caracterizó por ser una institución por la que pasaron numerosos jugadores argentinos (entre otros, el platense Lucas Lobos), aunque tal vez su máxima figura histórica haya sido el salvadoreño Jorge Alberto González Barillas, conocido mundialmente como el “Mágico” González.
La historia de Marcos Mauro es particular, porque su vida es especial. Tras haber nacido en Avellaneda y vivido en Claypole (donde jugaba en un club barrial con fuerte arraigo como Santa Clara, fundado el 1 de mayo de 1967), este joven de muy niño debió irse del país junto a su familia en el marco de la crisis del 2001. Sin embargo, el esfuerzo tiene premio: hoy el presente lo encuentra festejando un ascenso a la primera división del fútbol español.
Marcos Mauro tenía apenas once años cuando debió irse de su país natal. Pasó toda su adolescencia en Madrid, armando nuevos lazos, detrás de la oferta laboral que le salió a su padre. Cuando tenía dieciseis años se probó, quedó y debutó en la primera del Fuenlabrada, uno de los tantos equipos del ascenso español. Su carrera luego continuó en el Villareal B, Huesca, Villareal de nuevo, La Roda, Villareal otra vez y, ahí sí, el Cádiz.
Ese variado camino en el fútbol se inició en el 2009. Hoy, con veintinueve años de edad, sueña con marcar a Messi en el cruce que inevitablemente tendrá en el próximo torneo, ante el Barcelona. Ese sueño se le presenta recurrente en la histórica ciudad de Cadiz, portuaria localidad del suroeste español, fundada allá lejos y hace tiempo, en el año 1104 antes de Cristo (A.C.). Hoy, con cerca de ciento veinte mil habitantes, la andaluza Cádiz se muestra orgullosa no sólo de su puerto: también de sus playas (la mayoría urbanas), de sus fiestas (como por caso la de Semana Santa) y sobre todo de sus carnavales, que son de los más reconocidos en toda España.
En medio de todo eso, el Cádiz Fútbol Club (fundado el 10 de septiembre de 1910) es parte indisoluble del sentir de la población gaditana, donde la incidencia de los exiliados marroquíes no es menor (es la colectividad extranjera más numerosa en la ciudad). Allí, en ese equipo de camiseta amarilla con pantaloncitos azules, sobresale el argentino Mauro Marcos. Hincha de San Lorenzo de Almagro por herencia paterna, el defensor acaba de ser padre por primera vez, y destaca que el crío llegó “con un pan bajo el brazo”, en relación al ascenso con el Cádiz. En una entrevista concedida al sitio especializado en deportes “Doble Amarilla”; Marcos explicó que en Argentina tiene a toda su familia: “allá están mis abuelos, mis primos, mis tíos, toda mi familia está allá. Cada vez que puedo, en verano o cuando se da, me voy para allá. Me quedó una semana en casa de cada abuelo. Todo el tiempo que puedo lo paso con ellos”.
El defensor mantiene estrechos vínculos con nuestro país. Tantos, que sus amigos de la infancia palpitan desde Claypole (en el distrito de Almirante Brown) qué es lo que pasa con el popular Cádiz cada fin de semana. Así, los miles de kilómetros a través del océano Atlántico que separan esta localidad de la zona sur del Gran Buenos Aires con la portuaria Cádiz, parecen desvanecerse por efecto y gracia del fútbol.