Sergio Massa fue un gran candidato. El mejor que teníamos en ese momento de la historia argentina.

Hizo un gran esfuerzo, pero también cometió errores.

Nunca pudo controlar el aumento de precios, por ejemplo.

Acordaba precios con los formadores y se le mataban de risa.

La gente pedía control y nunca se animó a enfrentar a las grandes empresas alimenticias.

Esa falta de control, fue una de las causas de la derrota. La gente te decía : Si no puede controlar los precios. Hubo otras causas, pero ésta era clave.

Temor a las tapas de Clarín o de La Nación ? No lo se.

Si se que muchas se éstas cosas, que uno veía en los barrios, en los comercios de cercanía, en el conversar con los vecinos, estaban sucediendo y las transmitíamos, no a Sergio Massa porque no tenemos hoy llegada a él, pero si a varios de los dirigentes que lo acompañan.

Nos decían que nosotros no entendíamos nada. El final ya lo saben.

Hoy, si lo que dice la prensa es verdad, estamos en serios problemas.

Si el candidato que tuvo mas de 11 millones de votos, nuestro candidato, no ve lo que le está pasando a la gente con las medidas del Gobierno de Milei y le dice a la CGT que es apresurado llamar a un paro general, estamos otra vez en problemas.

El DNU y la ley omnibus, al margen de llevarse puesta la Constitución Nacional – en ésto coinciden hasta  constitucionalistas que muy lejos están de ser peronistas-, ataca transversalmente a todos los sectores de la socidad.

Milei va contra los indigentes, contra los pobres, contra la clase media, los trabajadores, contra los farmacéuticos, contra la salud, contra los jubilados y pensionados, contra las Pymes, contra la cultura, contra el deporte, contra la ciencia , contra  nuestras reservas de agua y minerales y podría serguir enumerando.

Todos éstos sectores de la sociedad productiva protestan individuallmente, salen a la calle, muchos cacerolean, pero así no sirve.

Se necesita que todos se articulen en reclamos conjuntos para hacerle sentir con fuerza los reclamos al Gobierno.

Pero también se necesita de la dirigencia conduccción, voluntad política y comprensión de lo que está sintiendo la gente, aún dentro de los votantes de Milei.

A pesar de mis críticas en otras oportunidades, hoy aplaudo y acompaño a la CGT por ponerse al frente y encabezar un reclamo con paro general.

Cuando un Presidente mesiánico pretende tener la suma del poder público, pretendiendo anular al Congreso Nacional pidendo delegación de facultades legislativas por 4 años, no se puede estar ajeno.

Desconozco si Sergio Massa quiere seguir haciendo política y continuar representando junto con otros dirigentes, al 44% de los argentinos que confiaron en ese proyecto que encabezaba.

Si su intención es dar un paso al costado (legítimo por cierto), y no seguir siendo la voz de millones de argentinos que la estan pasando mal y otros tantos que en el cortísimo plazo comenzaran a estarlo, debe así transmitirlo de cara a la gente.

Lo vamos a entender. Lo vamos a acompañar en su decisión. Pero debemos saber si va a ser uno de los que lideren ésta etapa de reclamos y lucha que se avecina o ya no vamos a contar con él.

Éste proceso requiere de dirigentes con firme vocación de liderazgo, con convicciones firmes y con disposición de representarnos y guiarnos por ese otro camino que no es el del Gobierno. No necesitamos dirigentes que nos digan que es apresurado enfrentar a un mesiánico, por más que haya sido elegido por la voluntad popiular.

No es momento para tibios.

Un párrafo final para nuestros legisladores nacionales.

Que el hoy oficialismo no respetó los usos y costumbres parlamentarias? No las respetó.

Se juntaron los libertarios, el PRO, la UCR y decidieron ser parte del gobierno y quedarse con los cargos directivos y de las comisiones. No hay discusión posible, es legal.

Ahora, no necesitamos legisladores que se quejen que les cortaron el micrófono. Necesitamos legisladores que se paren a gritar arriba de las mesas, que pateen puertas, que salgan a hablarle al pueblo en las calles.y que los conduzcan y acompañen en los reclamos que comienzan a germinar.

Los libertarios, el PRO y la UCR dijeron y dicen hasta el cansancio que vienen por el peronismo. Están cumpliendo con sus dichos. Está en nosotros y en nuestros dirigentes ponerles un límite. Aunque no saben los oficialistas de hoy, que el peronismo nunca va a desaparecer porque somos una sucesión permanente de JP.

Nuevamente, no es momento para tibios.