Restauran el pulmón verde de NecocheaMientras algunos piensan en talar, otros reforestan el Parque Miguel Lillo

Restauran el pulmón verde de Necochea

Mientras algunos piensan en talar, otros reforestan el Parque Miguel Lillo

8 julio, 2025 Desactivado Por Germán Costanzo Castiglione

En el marco de la Mesa de Consenso para la Conservación y Recuperación del Parque Miguel Lillo, distintas organizaciones, ONGs y áreas gubernamentales municipales y provinciales participaron de una jornada de plantación en sectores degradados del emblemático espacio verde de Necochea. La acción colectiva apuntó a restaurar la biodiversidad y fortalecer el compromiso comunitario con el cuidado del entorno natural.

 

Con el foco puesto en la recuperación y conservación del Parque Miguel Lillo, distintas instituciones, ONGs y áreas gubernamentales participaron de una nueva jornada de plantación colectiva, llevada a cabo en el sector de Avenida 10 y 107, en Necochea. La actividad se enmarca en las acciones impulsadas por la Mesa de Consenso para la Conservación y Recuperación del Parque Miguel Lillo, un espacio intersectorial que promueve el cuidado planificado y participativo de este patrimonio natural de la ciudad.

Durante la jornada se plantaron especies como pinos pinaster, cipreses, ceibos, catalpas, salicáceas y fornios, con el objetivo de cubrir sectores donde se habían retirado ejemplares por distintas razones y aumentar la diversidad del bosque costero.

La iniciativa cobra aún más valor si se tiene en cuenta que el Parque Miguel Lillo ha enfrentado históricamente amenazas de tala, muchas veces en nombre del supuesto “progreso”. Recientemente, se advirtió la pretensión de un club local de extraer 20 ejemplares con fines de ampliación de infraestructura, y otro club en enero de este año taló sin autorización 40 árboles, violando leyes provinciales y ordenanzas municipales. A pesar de haber sido sancionado por el Municipio, aún no se conocen las consecuencias efectivas que enfrentó, según señalaron vecinos y organizaciones ambientalistas.

“Es una jornada que se ha definido hacer en el marco de la Mesa de Consensos del Parque Miguel Lillo, que es una mesa intersectorial. En este sector particularmente, por distintas razones, se han ido retirando ejemplares y la idea fue precisamente recuperar esos ejemplares faltantes. Las plantas fueron provistas por el Vivero Municipal y hemos participado todas las organizaciones, tanto las ambientalistas como el Parque No Se Vende, la Asociación para la Conservación del Parque Miguel Lillo, el Colegio de Ingenieros Forestales, la Dirección Forestal provincial y la Dirección de Guardaparques”, expresó Julián Zugazúa, director de Guardaparques del municipio.

“Precisamente la Mesa de Consensos la hemos conformado para ir definiendo una cierta planificación y acciones mancomunadas entre organismos gubernamentales y ONGs. Se van a ir haciendo distintas acciones que tengan que ver con la conservación del Parque Miguel Lillo”, agregó.

Desde la Dirección Forestal del Ministerio de Desarrollo Agrario de la ProvinciaNicolás Archieri remarcó la importancia de mantener el diálogo institucional permanente:

“La importancia de conservar este pulmón verde que tiene Necochea y estar en constante comunicación entre nosotros con reuniones mensuales en las que tomamos decisiones para proteger este sitio que es muy importante para la ciudad”.

“Plantamos ceibos, catalpas, cipreses, pinos, todos derivados del vivero municipal. La idea es seguir en este trabajo comunitario, sumar más gente y que esto siga”, indicó.

Nerio Bognanni, representante de la Asociación para la Conservación del Parque Miguel Lillo, destacó la continuidad del trabajo articulado con el Estado:

“Estamos muy contentos con la Dirección de Guardaparques porque de alguna manera es la que motiva que la Mesa de Consensos se mantenga activa. Como ONG que protege el parque desde hace más de 20 años, creemos que la comunidad tiene que formar parte de esta construcción cultural. Esta es una jornada de tantas otras que vendrán. Uno de los objetivos a mediano plazo es fortalecer la educación ambiental”.

Desde el Colegio de Ingenieros Agrónomos y Forestales de la provinciaJosé Garcés explicó que la elección de especies responde a criterios de biodiversidad y uso comunitario:

“Tratamos de darle mayor diversidad al parque con especies como catalpas, ceibos, álamos o sauces. Este lugar, por su orientación, nos va a dar un espacio hermoso para que la gente venga y lo utilice”.

“El parque se está construyendo, no es que se plantó una vez y quedó así. A diferencia de otras formaciones naturales como el mar o el río, el parque es una construcción colectiva, pública, biodiversa. Es una construcción desde y para los ciudadanos”, remarcó.

“Asumimos varios compromisos técnicos que tienen que ver con la planificación del parque: objetivos de corto, mediano y largo plazo, que también incluyen aspectos educativos, ambientales, culturales y deportivos”, concluyó Garcés.

La jornada contó con la participación de la Dirección de Guardaparques, la Dirección Forestal del Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires, el Colegio de Ingenieros Agrónomos y Forestales, las asociaciones “El Parque No Se Vende” y “Asociación para la Conservación del Parque Miguel Lillo”, además del colectivo Ciudad Frutal.