La presencia del seleccionado argentino Sub 20, dirigido por un emblema «albiceleste» como Javier Mascherano, causa furor en San Juan y cientos de personas se juntan en la puerta del hotel en donde concentra el plantel a la espera de una foto o un autógrafo.

Como sucedió en Santiago del Estero, sede de los primeros dos partidos de la «albiceleste» en el Mundial Sub-20, el equipo juvenil que dirige Mascherano no pasó inadvertido en San Juan.

El hotel en donde concentra el seleccionado argentino está ubicado en una zona céntrica de la ciudad cuyana, a solo dos cuadras de la histórica Casa Natal de Domingo Faustino Sarmiento y a otras dos de las peatonales que nacen en la Plaza 25 de Mayo, lo cual favorece a la cercanía con la gente.

Los que van especialmente hacen guardia cerca de las vallas de seguridad y los curiosos que están de paso se quedan a la espera de la salida o la llegada del plantel de los entrenamientos. La presencia del seleccionado y lo que genera en el público también obligó a la seguridad local a cortar el tránsito de una de las calles más transitadas del centro sanjuanino.

El más requerido por la gente es Mascherano, un emblema del seleccionado y muy querido por los hinchas de River Plate.

Apenas por debajo del entrenador se ubica Valentín «Colo» Barco, de rápida irrupción en Boca Juniors y una de las figuras del plantel juvenil. «Bauti», un niño vestido con la camiseta «xeneize», se acercó junto a su padre con un cartel dedicado al defensor de Boca: «Colo Barco quiero conocerte».

Después de su golazo ante Nueva Zelanda, Luka Romero también es uno de los más requeridos por los hinchas que, por lo general, son estudiantes de los colegios de la zona.

Con los teléfonos celulares en la mano y hasta con las carpetas de estudio, los chicos esperan por una foto o un autógrafo de los jugadores que lucen en la indumentaria la tercera estrella ganada por la «Scaloneta» en el Mundial de Qatar.

El fervor por el equipo también se vio reflejado en las tribunas del estadio San Juan del Bicentenario: el pasado viernes, en la goleada sobre Nueva Zelanda, el «Gigante de Pocito», por el nombre del departamento donde está ubicado, estuvo colmado por casi 28 mil personas.

Si bien todavía quedan algunos tickets disponibles en el portal Deportick, la imagen se repetirá en el partido del miércoles ante Nigeria por los octavos de final.