La feria celebrará su 40mo. aniversario de manera presencial con arte latinoamericano en el estreno de «Remitente», que reúne quince galerías de arte continental y una selección de obras a cargo del argentino Mariano Mayer.

La feria española ARCOmadrid celebrará del 7 al 11 de julio su 40mo. aniversario de manera presencial con un gran protagonismo del arte latinoamericano en el estreno de «Remitente», que reúne quince galerías del continente americano y una selección de obras a cargo del argentino Mariano Mayer, quien se presenta ya no como curador sino como “cómplice”, para explicar su rol más ligado al “contexto y a las circunstancias” de permanente cambio, a raíz de la pandemia.

La presencia latinoamericana será “un espacio intermedio entre la sección y la exposición. Si bien las obras estarán a la venta, no hay stand. Es un pasillo sin división entre las galerías, con las obras que pudieron llegar a Madrid, ser enviadas de manera sencilla o rehacerse aquí”, explica Mayer, este argentino radicado en España, a Télam.

Se trata de un nuevo modelo que plantea la posibilidad de la presencia de obras que no requieren de transporte para su exhibición por su inmaterialidad, por la residencia del artista o por el apoyo de otras galerías, donde se verán espacios de México, Brasil, Santiago de Chile, Bogotá, Perú y Argentina.

“Hemos estado actuando al tiempo de los acontecimientos, con las fases, tanto a nivel europeo como latinoamericano. Algo que -de repente- se hacía de una forma hace dos meses, rápidamente podía cambiar. Mi intención fue intentar dar respuesta a esta posibilidad del envío de las obras, que no sea solamente video o audio sino también otros lenguajes como pintura, esculturas, dibujos, collage, fotografías, instalaciones, activaciones y performances en algunas obras».

Es así que la flamante “sección” Remitente incluirá 19 artistas y 24 galerías de nueve países de América Latina (por Argentina estarán Constitución, Herlitzka+Faria, Nora Fisch, Piedras y Rolf Art) y las obras del poeta chileno Raúl Zurita, el rosarino Mauro Guzmán, el mexicano Héctor Zamora, la neuquina Jimena Croceri o la peruana Natalia Iguiñiz, el colectivo Lolo y Lauti.

“América latina es un espacio importante en la feria, un vínculo creado a lo largo de muchos años, con las galerías, coleccionistas, artistas. Desde ahí es importante para la feria dar respuesta a un momento tan peculiar como el que estamos viviendo. Y esta sección surgió como respuesta desde la feria cuando se dieron cuenta que América latina en bloque no podía venir”, detalló Mayer.

Son un total de 131 galerías de 27 países las que participan en ARCOmadrid, de las cuales 105 integran el Programa General, 10 en Opening y 15 en REMITENTE, por lo que el 54% son extranjeras y el 32% de la región latinoamericana.

“El caso de Argentina es paradigmático -señaló Mayer-: la galería de Argentina que aplicó a la feria Nora Fisch estará presente a través de la obra de una artista de Santiago del Estero que vive en Madrid, Laura Mema, con quien no ha trabajado anteriormente. Circunstancias que de otro modo no se hubieran dado. Es interesante”, detalló Mayer en referencia a un vínculo surgido especialmente para este encuentro cultural.

Esta decisión “evita algo concreto: la imposibilidad de tener obra por parte de la galería”, señala el curador.

Para Mayer “es un modo de trabajar que ya estaba activo pero con esta realidad se subraya, y en contextos latinoamericanos aún más. La unión es fundamental para mantener un éxito y ese tipo de sinergia sostenida antes por el vínculo afectivo ahora puede realizarse por una necesidad, para poder concretar cosas. Y es atractivo y peculiar que una feria como ARCO se haga cargo de esa dinámica, de ese problema, y lo ponga en relieve”, agregó.

Al realizar la presentación formal a la prensa de la 40 edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo, la directora de ARCOmadrid, Maribel López, señaló que el resto de este año es ofrecer “un escenario para la reactivación” y dar el marco para el reencuentro profesional, para “por impulsar el mercado artístico, promocionar artistas y fomentar el coleccionismo”.

“Hemos tenido gran cuidado en el armado de esta exposición -prosiguió Mayer sobre Remitente-. Mi nombre no figura como curador sino como cómplice y tiene que ver con inventar otro vocabulario, con encontrar un modo certero de explicar y poner en valor la curaduría, que no tiene que ver con la selección, sino con otro tipo de cosas. Un intermedio entre la curaduría y las ganas”.

La cita de este año estará especialmente centrada en los profesionales para lo cual de miércoles a viernes serán las jornadas dirigidas exclusivamente a los agentes del sector, mientras que el fin de semana próximo abrirá sus puertas al público general, en el predio de IFEMA.

Esta nueva edición de ARCO se prevé una buena convocatoria de asistentes debido a la evolución de la vacunación con el consiguiente efecto sobre la remisión de la pandemia, sumado a un protocolo que contempla ordenar el flujo de asistentes y su movilidad, controles de aforo, distancias de seguridad, registro digital y renovación del aire en pabellones.

La feria tendrá en su sector central galerías de París, Zurich, Berlín, Viena, Ginebra, Tel Aviv y por Latinoamérica de San Pablo, La Habana, Guatemala, Santiago de Chile, Ciudad de México, Bogotá.

Entre los invitados, habrá 220 coleccionistas y 90 profesionales de 35 países.