El gobernador Axel Kicillof encabezó una reunión con prácticamente la totalidad de los intendentes peronistas bonaerenses; del encuentro también participaron algunos candidatos de Unión por la Patria de distritos donde gobierna la oposición. El cónclave tuvo lugar en La Plata.

El objetivo de la reunión encabezada por Axel Kicillof en La Plata, junto a los intendentes bonaerenses, fue hacer un llamamiento activo a toda la dirigencia peronista provincial, para militar fuertemente de cara a las elecciones del 22 de octubre. Kicillof insistió marcadamente en la necesidad de fortalecer la candidatura presidencial de Sergio Massa, ante el avance para, todos inimaginable tiempo atrás (al menos en los porcentajes que arrojó la elección PASO), de Javier Milei y La Libertad Avanza.

“Estuvimos todos. Puede haber faltado alguno que otro, pero la inmensa mayoría estuvo presente. Los de la Primera y Tercera sección electoral estuvieron completos. Y del interior no faltó casi nadie. El resumen es que hay que seguir laburando porque tenemos la responsabilidad de mejorar los números tanto en  lo provincial como sobre todo en lo nacional”. Esto dijo ante la consulta de ZETA NOTICIAS, un intendente del interior –que ganó cómodamente su distrito- apenas terminó la reunión, y mientras viajaba de regreso a su localidad, perteneciente a la quinta sección electoral.

“No hay proyecto de Provincia sin proyecto de Nación”, podría decirse que es el slogan que se ratificó ayer; el gobernador en algunos casos específicos –aunque sin hacer nombres- realizó una especie de “tirón de orejas”, al desmenuzar los resultados en aquellos distritos donde los porcentajes que logró la fórmula presidencial peronista, estuvieron muy por debajo de los votos logrados por los intendentes. No se piensa en Gobernación que hubo un impulso directo del corte de boleta a favor del tramo distrital, pero sí un no preocuparse demasiado por algunas cuestiones. De allí que el llamamiento fue a esforzarse para ir a buscar a cada uno de los que no concurrieron a las urnas, así como también  atraer a aquellos votantes que votaron en blanco, o que sufragaron por algunas de las muchas boletas presidenciales que no lograron siquiera llegar al 1,5% de los votos válidos emitidos.

La preocupación de la dirigencia peronistas es que Javier  Milei –en la provincia de Buenos Aires- contó 2.161.679 de sufragios a favor, y resultó así ser el candidato presidencial más votado. Para la categoría a gobernador, Axel Kicillof se llevó 2.891.276 votos, el 36% del total, siendo uno de los claros ganadores de las elecciones PASO. Esa especie de contradicción es la que se propone la dirigencia peronista, corregir en octubre.