Bajo el escrutinio de activistas como Juliana Orihuela, Equinor enfrenta la presión global por sus proyectos de combustibles fósiles. Desde Necochea hasta Noruega, la lucha por un futuro sostenible y la defensa de nuestros mares se intensifica en la Asamblea General Anual de la compañía que sucederá este 14 de mayo. La activista dialogó con NDEN acerca de la importancia de esta participación.

Este martes 14 de mayo, los accionistas de Equinor se reunirán en Stavanger, Noruega, para la Asamblea General Anual de la empresa. Un evento crucial donde se votará sobre la dirección estratégica futura de la compañía. En este contexto, la participación de Juliana Orihuela, una reconocida activista ambiental y editora digital de Necochea, toma relevancia al representar a Argentina en esta instancia internacional. Participará junto a otros activistas de Canadá, Tanzania, Brasil, Inglaterra, y Noruega. Juntos forman parte del grupo EquinorOut.

Juliana, conocida por su incansable lucha por un Mar sin Petroleras y como impulsora de Playa sin Motores, ha expresado su gratitud por esta oportunidad de participar en la reunión de accionistas de Equinor, una empresa en la que el 67% de las acciones son estatales.

«Estamos muy agradecidos por tener la oportunidad de participar en la reunión de accionistas de Equinor este año. La idea es cuestionar la lógica detrás de estos proyectos que parecen carecer de sentido económico y ambiental», declaró Orihuela, quien desde hace más de una década reside en Necochea y se considera parte activa de la comunidad.

Juliana agregó “vamos a explicar cuan insensatos son estos proyectos, tenemos información de que no están consiguiendo grandes cantidades de dinero con estas inversiones así que nos gustaría saber porque lo están haciendo”

Orihuela forma parte del movimiento global #EquinorOut, que exige a Equinor que detenga toda exploración y desarrollo de nuevos proyectos de petróleo y gas, y se comprometa plenamente con una transición hacia energías renovables. Este movimiento, que aglutina activistas de diversos países como Brasil, Inglaterra, Noruega, Canadá y Tanzania, busca presionar a Equinor para alinear sus inversiones con la ciencia climática y cancelar todos los nuevos proyectos de combustibles fósiles en todo el mundo.

Además de su participación en la AGM de Equinor, Orihuela ha advertido sobre los impactos ambientales y económicos de los proyectos de la empresa en Argentina, como el Pozo Argerich I a 300 km de la costa de Necochea.

Orihuela dijo “Lastimosamente hay muchos barcos perforadores en nuestro mar. El que llegó hace pocas semanas es el Valaris DS-17, y es el que tiene la tecnología para hacer el pozo Argerich I, que va a ser el primer pozo de aguas súper profundas de la historia de la Argentina en una zona muy importante para nuestra fauna”.

Al respecto, Orihuela advirtió “El pozo tiene un tiempo estimado de duración de 60, que es el plazo legal que les han otorgado. Así que vamos a tener que estar atentos a eso. Además, hay una parte de la medida de cautelar que no se ha respondido aún, y que podría constituir un conflicto por incumplimiento. Ha pasado la etapa de resistencia, ahora toca organizarnos para volvernos estrategas.

Finalmente, la activista mencionó que acá en Argentina también habrá una actividad proximamente: “La Red de Comunidades Costeras buscará realizar en junio su tercer encuentro anual. Esto también lo celebramos, porque trabajamos cerca de 70 personas en los 4500km de costa detrás de un mismo objetivo”

La presencia de Juliana Orihuela en la Asamblea General Anual de Equinor en Noruega marca un gran antecedente de participación ciudadana para la comunidad de Necochea y Argentina en su lucha por la defensa del medio ambiente y la transición hacia energías más limpias. Su voz, junto con la de otros activistas internacionales, destaca la importancia de enfrentar los desafíos climáticos y ambientales con acciones concretas y coordinadas.