El Papa Francisco se comunicó telefónicamente con la madre y el padre de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años asesinado a golpes en la puerta de un boliche de la ciudad bonaerense de Villa Gesell.

El Papa Francisco se comunicó telefónicamente con la madre y el padre de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años asesinado a golpes en la puerta de un boliche de la ciudad bonaerense de Villa Gesell. Se trató de «un gesto» que quiso dar la máxima autoridad de la Iglesia Católica «ante las situaciones de violencia», definieron desde el Vaticano.

El llamado ocurrió el domingo, día en que la familia del joven de 18 años, por cuyo crimen hay diez jugadores de rugby detenidos, realizó una misa en la Parroquia San Agustín, de la ciudad de Buenos Aires, al cumplirse dos semanas del hecho. El padre de Fernando, Silvino Báez, confirmó a varios medios la comunicación con Jorge Bergoglio. Sin embargo, no brindó detalles al respecto. Una fuente del Vaticano citada por TN afirmó que el llamado del Papa fue «un gesto y un mensaje del Papa para la sociedad, ante las situaciones de violencia que se viven en estos momentos en la Argentina y en el mundo». Según se supo, Fernando Báez Sosa era católico y fue educado en el Colegio Marista, del barrio porteño de Caballito. Como tal, participó también de varios proyectos solidarios, algunos de ellos organizados por la ONG Seres vs Teneres. El 18 de enero pasado a la madrugada, el joven fue asesinado a trompadas y patadas en la puerta del boliche Le Brique, de Villa Gesell, por parte de un grupo de rugbiers de la ciudad bonaerense de Zárate. El hecho conmocionó a la sociedad a tal punto que trascendió las fronteras del país y llegó hasta Roma.