El dueño de Twitter y de la fábrica de autos eléctricos Tesla, Elon Musk, se reunió este martes en Beijing con el canciller chino, Qin Gang, semanas después de que el multimillonario estadounidense anunciara su intención de abrir su segunda fábrica en China.

Según un comunicado de la Cancillería china, Qin le hizo saber a Musk que China está «comprometida con la creación de un mejor entorno empresarial orientado al mercado, basado en el Estado de derecho e internacionalizado» para las empresas extranjeras.

Musk, por su parte, le dijo a Qin que Tesla está dispuesta a expandir sus negocios en el país, según el mismo comunicado, informó la agencia de noticias AFP.

La visita de Musk es la primera a China desde el inicio de la pandemia de Covid-19 y se produce luego de un importante aumento de la competencia con los fabricantes de vehículos chinos.

Su compañía de vehículos eléctricos anunció en abril que construiría una nueva planta de baterías en Shanghái, la segunda fábrica de Tesla en la ciudad después de otra llamada Gigafactory, que comenzó a construirse en 2019.