El otro riesgo de la pandemiaEl bajo número de estudios oncológicos y cardiovasculares

El otro riesgo de la pandemia

El bajo número de estudios oncológicos y cardiovasculares

26 junio, 2020 Desactivado Por Viviana Peña Balladares

 

No se concurre a realizar las consultas clínicas o los estudios correspondientes, con lo cual no se puede determinar cómo se encuentra el paciente ante una sospecha clínica. El aislamiento social, preventivo y obligatorio a raíz de la propagación del COVID-19, una enfermedad altamente contagiosa que llegó para “patear” el tablero del orden mundial y obligar a los Estados y sociedades a adaptarse de manera diligente a la nueva coyuntura.

Esta “nueva normalidad”, de la que tanto se habla, acaparó todos los aspectos de la vida -desde un simple saludo hasta el cierre de fronteras-. Y pareciera que llegó para quedarse.Pero como una moneda de dos caras, la pandemia trajo sus cosas positivas como así también las negativas. Por un lado, la constante concientización acerca de la higiene y el lavado de manos trae consigo auténticos efectos para la salud de las personas pero, del otro lado, el miedo a contagiarse o el “pánico colectivo” como lo llamó el filósofo Giorgio Agamben, deriva en que, un gran número de personas no salga a la calle ni siquiera para cumplir con una actividad esencial como es la visita al médico.

Sobre este tema alertó la Dra Patricia Carrascosa, Directora Médica de Diagnóstico Maipú: “Muchos de los pacientes que nosotros atendemos son pacientes oncológicos o con problemas cardiovasculares y, venimos notando con preocupación, que hay una clara tendencia a concurrir significativamente menos a los chequeos médicos por miedo a contagiarse del COVID-19”

Esta conclusión se presenta a raíz de la drástica disminución en los pacientes que tendrían que haber repetido estudios o hacerse chequeos y no lo hicieron. Entre los más importantes se encuentran las tomografías computadas oncológicas, cardíacas, los estudios PET CT, mamografías, ergometrías, estudios de medicina nuclear cardíaca, eco doppler, eco estrés, resonancia cardíaca, entre otros.

Según los datos brindados por Diagnóstico Maipú, desde el 20 de marzo con el comienzo de la cuarentena hasta fin de ese mismo mes, un total de 15 pacientes se realizaron los estudios PET -TC- cuando en el mismo período y mes pero del 2019 fueron 48 pacientes. Esto significa que casi el 70% de las personas que tenía que repetir el estudio, no lo hizo. Pero por más que la curva es ascendente si uno compara el mes en el que comenzó la cuarentena con el actual, la Dra. Carrascosa alerta que el número sigue siendo bajo: “A principios de junio están concurriendo un 35%-40% menos de los pacientes que tendrían que realizarse los estudios, situación que debería cambiar ya que son pacientes con enfermedades en seguimiento grave o con lesiones altamente sospechosas”.

A la hora de analizar las conductas en las mamografías, sólo lo realizó el 20%.

“Este dato es aún más alarmante en el contexto de pacientes con mamografías con sospecha de malignidad e indicación precisa de biopsia mamaria para determinar diagnóstico anatomopatológico y así indicar la conducta terapéutica a seguir. En este grupo de pacientes su concurrencia fue del 80%, aunque aún sigue siendo insuficiente debido a la posible gravedad del cuadro”, destacó la Dra. Carrascosa.

Estudios cardiológicos

Otro factor, no menos inquietante, es que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo. Sin embargo, en el transcurso de las últimas décadas se realizaron medidas de control, prevención, diagnóstico y tratamiento con el fin de reducir la mortalidad, lo que lleva a que se alerte sobre estas conductas que podrían revertir la situación lograda.

Según la Dra. Carrascosa, el temor a contagiarse al salir a la calle y concurrir a centros médicos, es una de las causas por las que las personas no retoman sus estudios clínicos. entre las medidas más importantes que se tomaron se encuentran: la medición de temperatura de las personas que ingresan a la institución, colocación de alcohol en gel en sus manos, sanitización de las suelas de los calzados, completado del formulario de declaración jurada al paciente y verificación del uso indicado del barbijo. Una vez cumplidas estas medidas, el paciente puede ingresar a la sede.

Los turnos son otro de los temas que debatió el equipo médico. Finalmente se decidió que sean más espaciados, no sólo para evitar la superposición de los pacientes en las salas de espera, sino, además, para que pueda realizarse el proceso de desinfección entre paciente y paciente antes mencionado. Dra. Patricia Carrascosa

 

( Fuente : Infobae)