AgroexportacionesDesde la entrada en vigencia del «dólar soja» se vendieron casi 9 millones de toneladas
19 septiembre, 2022
La comercialización se dio en el marco del Programa de Incremento Exportador, que implementó un tipo de cambio de $200 por dólar para las exportaciones de la oleaginosa, a la que los exportadores se comprometieron a liquidar en menos de US$ 5.000 millones.
Los productores de soja comercializaron casi 9 millones de toneladas, desde que el lunes 5 de septiembre entró en vigencia el Programa de Incremento Exportador, que implementa un tipo de cambio de $ 200 por dólar para las exportaciones de la oleaginosa hasta el 30 de septiembre próximo.
De acuerdo con las cifras de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el viernes se vendieron 615.678 toneladas de soja, con lo cual desde el lunes 5 totalizan 8.839.095 toneladas en diez ruedas.
Los contratos nuevos de compraventa concertados en pesos el viernes y en fechas previas pero anotados el último día de la semana pasada sumaron en conjunto 381.252 toneladas, y el valor promedio de esos negocios resultó en $ 69.228 por unidad de peso. Por otro lado, también se destacaron las fijaciones de operaciones concertadas con anterioridad al miércoles por 107.558 toneladas, alcanzando un valor promedio de $ 69.940.
En relación con los negocios pactados en dólares, los contratos de compraventa de soja registraron un valor promedio de US$ 375,74 por un volumen de 7.227 toneladas; en tanto que se anotaron fijaciones por 10.419 toneladas a un valor promedio de US$ 356.
La instrumentación del denominado «dólar soja» –que, en la práctica, elimina el peso impositivo de los derechos a la exportación- permitió acelerar la entrada de divisas por parte del sector agroexportador que ingresó US$ 2.200 millones en la primera semana y casi US$ 1.400 millones en la segunda semana de vigencia.
De esta forma, ingresaron hasta el viernes pasado divisas por US$ 3.564 millones, lo cual sobrepasa la mitad de la meta del Gobierno que estipulaba unos US$ 5.000 millones al anunciar la medida.
El ingreso de dólares por las ventas al exterior le permitió al Banco Central (BCRA) engrosar sus reservas netas en US$ 2.190 millones en lo que va de septiembre. A su vez, el incremento de las exportaciones también se refleja en el movimiento en los puertos.
Las operaciones de exportación de soja -en base a los registró de la delegación San Lorenzo de la Aduana- registraron la semana previa a la puesta en marcha del programa el ingreso de 4.860 camiones, mientras que, entre el 5 y el 10 de septiembre ingresaron a la zona portuaria del sur santafesino 8.873 vehículos de carga, «lo que se traduce en un aumento de más del 80%», según informó la Aduana.
Asimismo, según aseguró el viernes último el secretario de Transporte, Diego Giuliano, a Télam Radio, se registró un «aumento de casi el 67% en el movimiento del transporte de cargas» en el conjunto de los grandes puertos del país.
«La liquidación de soja ha sido muy importante, ha tenido una respuesta muy positiva y esto aumentó la carga, aumentó la logística y aumentó también la llegada a los puertos, alimentado también por el ferrocarril, que da lugar a esta situación distinta en la Argentina», afirmó Giuliano.
El Programa de Incremento Exportador se extenderá hasta el 30 de septiembre y fue acordada con los principales complejos exportadores.
Al oficializar la medida, a través del Decreto 576/2022, el Gobierno consideró que el aumento en el ingreso de divisas «contribuiría a aliviar el impacto negativo en las importaciones locales de la suba en los precios de combustibles y energía que afecta severamente la disponibilidad de reservas».
Con los mayores ingresos obtenidos por la apreciación cambiaria, se dispuso en el decreto la creación del Fondo Incremento Exportador, el cual recibirá una proporción de la recaudación que se obtenga de los derechos de exportación de la soja liquidada.
El mismo financiará «una prestación monetaria extraordinaria no contributiva y de alcance nacional que asegure una adecuada alimentación para las personas en situación de extrema vulnerabilidad», para la cual se tendrá en cuenta si el beneficiario posee «alguna prestación por desempleo o programa social».
También, según se estableció en la norma, se financiarán «programas que estimulen la producción y el desarrollo de pequeños y medianos productores y de economías regionales».
FUENTE:TELAM