Córdoba comenzó a medir la contaminación atmosférica más peligrosaCórdoba capital medirá material particulado de 2,5 micrones
5 mayo, 2021
Se instalaron tres estaciones para medir el esmog más nocivo. Desde agosto del 2020 la calidad del aire solo desmejoró por los incendios.
La Municipalidad de Córdoba comenzó a monitorear uno de los contaminantes más nocivos para la salud: material particulado de 2,5 micrones (PM2,5). Estas partículas pueden ingresar hasta los pulmones y la sangre por lo que están asociadas a varios problemas de salud.
A nivel mundial, la contaminación atmosférica con PM2,5 reduce en casi tres años la expectativa de vida y produce la muerte prematura de 8,8 millones de personas al año, según un artículo publicado el año pasado en la revista científica Cardiovascular Research.
La ciudad de Córdoba fue pionera en medir la calidad de aire en la década de 1990 a través de los “camioncitos atmosféricos”. Pero ese monitoreo se suspendió en 2001. El municipio retomó los estudios en 2018 a través de un convenio con la Facultad Córdoba de la Universidad Tecnológica Nacional.
Y desde agosto pasado el municipio instaló tres estaciones para medir PM2,5. Están ubicadas en el Jardín Botánico, barrio Alto Alberdi y Camino a San Antonio.
En 2020 realizaron mediciones entre agosto y noviembre. En el Jardín Botánico solo el 6 por ciento de los días se registró una concentración diaria promedio superior al valor de referencia para indicar una la calidad de aire insalubre para la población sensible. En Alto Alberdi y Camino a San Antonio ese porcentaje fue del 5 por ciento.
La resolución provincial 105/2017 del entonces Ministerio de Agua, Ambientes y Servicios Pública fijó ese límite en 35 microgramos por metro cúbico de aire de promedio en 24 horas. La guía de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS) fija como valor confiable 25 microgramos/m3. A partir de este número, está demostrado que el PM2,5 incrementa el índice de mortalidad.
Esmog peligroso
Estudios anteriores habían detectado que en el 17 por ciento de los días del año se supera el valor de referencia de PM2,5 para la ciudad de Córdoba.
El material particulado más grande (PM10) está formado por polvo, polen y moho y es el que causa reacciones alérgicas, bronquitis y brotes de asma.
Pero el PM2,5 es más peligroso porque pueden penetrar más profundamente en el tracto respiratorio. Al inhalarlas ingresan al torrente sanguíneo desde los pulmones.
Red de monitoreo
Laura Rovetto, directora de Evaluación de Impacto Ambiental y Cambio Climático de la Municipalidad, asegura que la idea es instalar 10 estaciones de monitoreo de PM2,5 en tiempo real. “El objetivo es tener una visión global de toda la ciudad. Se van a poner en distintos puntos de la ciudad. Las primeras fueron escogidas en sitios de fácil acceso y protegidos”, explica.
Para Rovetto, según estos primeros datos, el índice de calidad de aire de la ciudad de Córdoba es bueno. “Son pocos los días con una calidad de aire baja, pero tampoco fueron de preocupación. Para lo que va de 2021 incluso obtuvimos mejores resultados”, asegura.
Y explica que esos eventos estuvieron relacionados con los incendios que afectaron a la provincia el año pasado. “No se observaron mayores inconvenientes. En el centro también se detectó el impacto en el aire de los incendios, a pesar de que es un sector encajonada”, detalla.
Hebe Carreras, experta en contaminación atmosférica del Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (Imbiv) del Conicet y la Universidad Nacional de Córdoba, también cree que la calidad del aire en Córdoba es “en promedio buena” para la población en general.
Pero advierte: “El problema ocurre cuando se dan inversiones térmicas en la atmósfera. Son eventos muy puntuales y frecuentes en Córdoba durante el invierno. En esos días la calidad del aire puede ser peligrosa para los grupos vulnerables como niños, adultos mayores y personas con problemas respiratorios”.
Carreras está instalando estaciones de PM2,5 en la ciudad con apoyo municipal. Rescata que las autoridades pongan en la agenda pública el problema ambiental y de salud.
“En los centros urbanos, el PM2,5 depende más de las fuente locales de contaminación como los vehículos. Pero también del entorno porque la vegetación sirve de filtro”, explica.
Y agrega que los incendios pueden generar este tipo de contaminación porque producen partículas livianas que pueden llegar a las ciudades por el viento.
Señala que otro punto a tener en cuenta es el momento del año. Y ejemplifica: “Cuando empiezan las lluvias, la calidad del aire mejora notablemente en Córdoba. Y los meses más problemáticos son junio y julio”.
Sobre las mediciones del año pasado, Carreras advierte que a nivel global fue un año atípico por la pandemia. “Se redujo mucho la circulación de vehículos por lo que la contaminación fue más baja durante varios días”, detalla.
Carreras está trabajando en mediciones de calidad de aire en zonas vulnerables para asociar este problema ambiental con el estado de salud de los niños en tiempo real.
En trabajos anteriores, la investigadores determinó de manera indirecta que una baja en la calidad de aire en Córdoba provoca una aumento de las consultas por cuadros respiratorios en los centro de salud.
Rovetto explica que el monitoreo en tiempo real permitirá dar recomendaciones a la población. Por ejemplo, el uso del barbijo, un elemento cotidiano durante esta pandemia. También evitar que las personas con problemas respiratorios salgan a la vía pública.
“Siendo más ambiciosos, ayudará a identificar zona o momentos con eventos puntuales de baja de la calidad de aire y rastrear la fuente como una quema clandestina”, apunta.
Posibles medidas
Federico Kopta del Foro Ambiental Córdoba asegura de la ciudad de Córdoba tiene severos problemas de contaminación atmosférica.
Señala una causa natural: “La ciudad está en un valle que corre de este a oeste, lo que limita los vientos norte y sur. A esto se suma el fenómeno estacional de inversión térmica, por el cual en las mañanas frías, secas y sin viento del invierno, se produce la acumulación de contaminantes en los primeros metros de la atmósfera”.
Kopta sugiere alguna medidas para reducir la contaminación:
– Mejor coordinación de los semáforos
– Controlar las emisiones industriales
– Prohibir la quema de basura, neumáticos y hojas secas en la ciudad
– A medianos plazo se debería impulsar un transporte público con niveles de emisiones más bajos.
– Otros problemas a resolver, ya desde el Gobierno de Córdoba, son la aplicación de plaguicidas cerca de los ejidos urbanos y los incendios de bosques y pastizales.
Fecha de Publicación: 05/05/2021
Fuente: La Voz del Interior
Provincia/Región: Córdoba