Conflicto bélicoComenzó el tercer mes de guerra con otro intento fallido de evacuación en Mariupol
25 abril, 2022
Paralelamente, los secretarios de Estado y de Defensa de Estados Unidos, Antony Blinken y Lloyd Austin, llegaron a Kiev para conversar con autoridades ucranianas por primera vez desde que comenzara la invasión hace dos meses, informó la Presidencia de Ucrania.
Kiev propuso a Rusia dialogar junto a la acería Azovstal, en Mariupol, una ciudad controlada casi totalmente por las fuerzas rusas.
«Hemos invitado a los rusos a llevar a cabo una sesión especial de diálogos justo al lado de la planta de Azovstal«, declaró el asesor presidencial Oleksiy Arestovich, que indicó que «esperaba la respuesta» de la delegación rusa, informó la agencia de noticias AFP.
Esto ocurrió luego de que el coordinador de la ONU para la ayuda humanitaria en Ucrania, Amin Awad, pidiera una tregua «inmediata» en Mariupol para permitir la evacuación de civiles que seguían atrapados en esta ciudad portuaria.
«Necesitamos una pausa en los combates ahora mismo para salvar vidas, cuanto más esperemos, más vidas estarán amenazadas; se les debe permitir evacuar ya, hoy mismo, mañana será demasiado tarde», clamó Awad en un comunicado.
Según el texto del organismo, unos 100.000 civiles permanecían en la ciudad.
La viceprimera ministra ucraniana, Irina Vereschuk, por su parte, expresó que «el método más eficaz» para evacuar a los civiles podría ser una intervención de la ONU, luego de anunciar que los corredores humanitarios que Ucrania intentaba organizar desde Mariupol habían vuelto a fracasar este domingo.
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, el 24 de febrero último, fallecieron más de 20.000 personas en Mariupol, detalló un nuevo balance de víctimas ofrecido por el alcalde, Vadim Boichenko, informaron las agencias de noticias ucraniana UNIAN y Europa Press.
La oferta de diálogo se produjo en momentos en que informes del avance ruso en el Donbass, región integrada por las provincias separatistas Donetsk y Lugansk, parecen marcar una nueva fase de la guerra comenzada el 24 de febrero con una invasión rusa en tres frentes.
En pocos días, Rusia posicionó sus tropas cerca de Kiev, que bombardearon lugares militares y civiles varias semanas. Moscú retiró estas tropas a finales de marzo y anunció una ofensiva para «liberar» el Donbass, que es de mayoría rusoparlante.
Ucrania dio por iniciada esa ofensiva la semana pasada, hablando de intensos combates y ataques rusos en varias ciudades, y Rusia reportó desde entonces una intensificación de bombardeos en toda Ucrania, pero sobre todo en el Donbass.
El Estado Mayor Conjunto de Ucrania informó este domingo que las fuerzas rusas que operan en el Donbass dispararon contra posiciones ucranianas a lo largo de toda la línea del frente de Lugansk y Donetsk.
En un comunicado, agregó que el Ejército ruso redobló su avance hacia las localidades de Siverodonetsk y Popasna, en Lugansk, y de Kurakhiv, en Dontesk.
El gobernador de Lugansk, Serhiy Gaidai, dijo que al menos ocho personas murieron en bombardeos rusos en las últimas 24 horas.
En Moscú, el vocero del Ministerio de Defensa ruso, general Igor Konashenkov, afirmó que el Ejército destruyó en las últimas horas, con misiles guiados de precisión, una fábrica de pólvora y explosivos en la región de Dnipro, que limita con Dontesk por el oeste.
Konashenkov detalló que las fuerzas rusas también atacaron varios depósitos con municiones de artillería y cohetes en cinco localidades de la provincia de Jarkov, que limita por el oeste con Donetsk y con Lugansk, informó la agencia de noticias Sputnik.
Agregó que la artillería rusa alcanzó 423 objetivos ucranianos durante la noche, incluidas posiciones fortificadas y concentraciones de tropas, mientras que aviones de combate rusos destruyeron 26 objetivos militares.
Si bien Estados Unidos no mandó tropas a Ucrania, le dio armas y millones de dólares para pelear la guerra, y está al frente de una campaña internacional de represalias contra Moscú por la invasión, en la forma de sanciones diplomáticas y económicas.
Por primera vez desde el inicio de la invasión rusa, Blinken y Austin llegaron a Kiev, anunció la Presidencia de Ucrania poco antes de la medianoche local (las 18 en la Argentina), según AFP.
Esas visitas habían sido anunciadas este sábado por la noche por el presidente Volodimir Zelenski, en una conferencia de prensa en una estación de subte de la capital, pero la Casa Blanca no hizo comentarios.
«Hoy no se puede venir con las manos vacías, y estamos esperando no solo presentes, alguna torta, estamos esperando cosas específicas y armas específicas«, manifestó Zelenski en alusión al encuentro.
La llegada de Blinken coincidiría también con las festividades de la Pascua ortodoxa, que celebran los fieles de esa rama del cristianismo en Ucrania, Rusia y otros países, en conmemoración de la resurrección de Jesucristo.
En una declaración por la festividad desde la antigua catedral Santa Sofía, Zelenski dijo que «la gran fiesta de hoy nos da gran esperanza y una fe inquebrantable en que la luz vencerá a la oscuridad, el bien al mal, la vida a la muerte, y que Ucrania triunfará».
También este domingo, autoridades de la sureña ciudad portuaria de Odesa, sobre el mar Negro, dijeron que un bebé de tres meses estuvo entre los ocho muertos que dejó ayer un ataque con misiles rusos.
Otras 18 personas resultaron heridas, según la cifra de víctimas suministrada ayer, que no varió.
Desde el Vaticano, en tanto, el papa Francisco renovó este domingo ante miles de fieles en la plaza San Pedro su llamado a una tregua en Ucrania con motivo de la Pascua ortodoxa.(Télam)