El representante argentino ante el organismo mundial, Federico Villegas Beltrán, planteó formalmente la inquietud sobre la situación en el país presidido por Daniel Ortega.

El Gobierno argentino reiteró este martes ante las Naciones Unidas (ONU) su «preocupación» por la «situación de los derechos humanos en Nicaragua», tal como lo hizo recientemente en la OEA, en particular por «las detenciones de figuras políticas de la oposición», medida que solicitó «sea reconsiderada por las autoridades nicaragüenses».

Así lo expresó el representante argentino, Federico Villegas Beltrán, en el marco de la 47° período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, con sede en la ciudad de Ginebra, en el que se trató la actualización del informe de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.

Según señaló el Palacio San Martín en un comunicado, la República Argentina aprovechó la ocasión para «agradecer a la Alta Comisionada, y reiteró el apoyo a su trabajo y esfuerzos en todas las regiones del mundo que eleva los estándares de protección de los derechos humanos».

Tras convocar este lunes a consultas a su embajador en Nicaragua, Mateo Daniel Capitanich, la Argentina volvió a expresar este martes su «preocupación por la situación de los derechos humanos en Nicaragua, tal como lo hizo recientemente en la OEA, en particular por las detenciones de figuras políticas de la oposición, medida que nuestro país solicita sea reconsiderada por las autoridades nicaragüenses», destaca el documento de la cartera encabezada por el canciller Felipe Solá.

En Ginebra, Villegas Beltrán manifestó también la «preocupación ante las continuas denuncias de graves violaciones de los derechos humanos, la persistencia de las restricciones al espacio cívico y la represión de la disidencia, conforme lo dispuesto por la resolución 46/2 aprobada por el Consejo en marzo pasado, con el voto favorable de la Argentina».

Asimismo, el Gobierno argentino acompañó este martes el pedido de la Alta Comisionada para que pueda ingresar a Nicaragua la Oficina de DDHH de la ONU, indica el comunicado.

Cabe recordar que la Argentina, en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, cuando se trata de consideraciones específicas sobre países, habitualmente opina de manera individual.

La República Argentina aprovechó la ocasión para «agradecer a la Alta Comisionada, y reiteró el apoyo a su trabajo y esfuerzos en todas las regiones del mundo que eleva los estándares de protección de los derechos humanos».

Durante la sesión de este martes no se realizó votación, sino que la Alta Comisionada dio su informe anual.

Algunos miembros enviaron anticipadamente su opinión mediante videos grabados y la Argentina emitió su opinión de igual modo, tal como lo hicieron otras naciones.

La Argentina llamó este lunes a consultas a su embajador en Managua, una medida compartida con México, en medio de las «preocupantes acciones políticas-legales» llevadas a cabo por la administración del presidente Daniel Ortega.

Tras convocar ayer a consultas a su embajador en Nicaragua, Mateo Daniel Capitanich, la Argentina volvió a expresar hoy su «preocupación por la situación de los derechos humanos en Nicaragua».

La decisión diplomática fue anunciada por las administraciones de Alberto Fernández y Andrés Manuel López Obrador, en una declaración conjunta en la que ambos países expresaron su «preocupación» por las «acciones políticas-legales realizadas por el Gobierno nicaragüense en los últimos días, que han puesto en riesgo la integridad y libertad de diversas figuras de la oposición (incluidos precandidatos presidenciales), activistas y empresarios nicaragüenses».

En el comunicado conjunto, difundido este lunes por las cancillerías de ambos países, se exhorta, además, a respetar el principio de no intervención en asuntos internos de otros Estados, en línea con la postura que ambos países mantuvieron días atrás, cuando se abstuvieron de votar en la Organización de los Estados Americanos (OEA) una resolución contra el gobierno de Daniel Ortega.