Cine - Estreno«Anatomía de una caída», la ganadora en Cannes que se hizo lugar entre los Oscar
25 enero, 2024
Los amantes de las películas de juicios encontrarán en esta obra de Justine Triet a una gran pieza cinematográfica, con encendidos y cerebrales interrogatorios y retórica de primer nivel en acción. No en vano se llevó la Palma de Oro el año pasado y aspira a ser reconocida en Hollywood en marzo próximo.
El aclamado thriller legal francés «Anatomía de una caída», ganador de la última Palma de Oro de Cannes y nominado a cinco premios Oscar, se estrena este jueves en cines con una propuesta muy afinada en cuanto al guion y la dirección de Justine Triet, y liderada por una brillante actuación de la alemana Sandra Hüller.
Triet, tercera mujer en ganar el galardón principal del Festival de Cannes, se posiciona con su cuarta película como una de las figuras de relevancia en la próxima gala de los premios de la Academia de Hollywood, con fecha para el 10 de marzo, certamen al que se incorpora también como único crédito femenino en la contienda del rubro de Mejor Dirección, en competencia nada menos que con los consagrados Martin Scorsese, Christopher Nolan, Yorgos Lanthimos y Jonathan Glazer.
Con un Globo de Oro ganado por su guion y el drama judicial premiado como Mejor Película Internacional en esa gala, el filme de Trier pelea también por el lauro principal de los Oscar y en los rubros de Montaje, Edición, Guion original y Actriz, lugar en el que Hüller se cuenta como una de las favoritas a partir de una vívida interpretación.
La historia sigue a la muerte de Samuel, encarnado por Samuel Theis, quien vive con su esposa Sandra (Hüller) y su hijo de 11 años Daniel, e inicia el metraje con su fallecimiento tras una caída desde el ático del remoto chalet que habitan en las montañas de los Alpes Franceses. La mujer se convierte en la principal sospechosa y la investigación del hecho y el juicio, que suscita el interés mediático, se torna un angustioso viaje psicológico a las fuentes de la conflictiva relación del matrimonio.
Más allá de ser en su forma un thriller legal, los tópicos abarcados apuntan más a un drama trágico sobre cónyuges en crisis: «La intención era crear una película que representara el deterioro de la relación de una pareja. El concepto era retratar el deterioro físico y emocional de un cuerpo de manera técnica, como símbolo del deterioro de la historia de amor», explicó Trier en declaraciones a la prensa.
Otra de las varias virtudes del drama es que a pesar de sus dos horas y media de duración, la buena dinámica de su estructura narrativa hace que sea muy entretenida y genere interés, ya que se apoya en puntos de giro numerosos que hacen que la historia avance y salgan a la luz más detalles que cambian el rumbo de la batalla legal, en la que también se destacan los dotes actorales de Milo Machado, Graner en el rol del hijo, y de Antoine Reinartz y Swann Arlaud, interpretando a los abogados de la fiscalía y la defensa, respectivamente.
La película cuenta también con aproximaciones experimentales en ciertos pasajes, con planos muy cerrados y tomas no tan tradicionales, recurso que resulta alternativo y da un poco de frescura a un thriller legal con una temática trágica.
«Tenía muchas ganas de volver a trabajar con Sandra después de nuestro trabajo en ‘Sibyl’ (2019) y escribí el guion teniéndola en mente. Esta mujer liberal, juzgada por su sexualidad, su carrera y su maternidad fue una de las primeras cosas que despertó mi interés. Creí que le aportaría complejidad y profundidad al personaje, sin que fuera un mero mensaje», contó la directora sobre la elección de la protagonista, con quien formó una sociedad artística en la que descansa el ambicioso filme.
Triet sobresale con su película a partir del tratamiento de las problemáticas de pareja en el siglo XXI y retrata dinámicas actuales de las relaciones de poder matrimoniales con un estilo frontal y crudo, donde reside gran parte de la fortaleza y sustancia del filme. A su vez, la directora muestra su destreza a la hora de ir administrando la información que da al público y es uno de los factores de la aclamación de la película en los festivales y en la crítica especializada.
En cuanto a la calidad de las escenas del litigio, los amantes de las películas de juicios encontrarán también en «Anatomía de una caída» a una gran pieza cinematográfica, con encendidos y cerebrales interrogatorios y retórica de primer nivel en acción.
Finalmente, el modo de Triet de cerrar la narración sea probablemente una de sus mejores elecciones, ya que juega con los paradigmas del subgénero policial que la película integra desde su inicio, el denominado «Whodunit»; en español, «¿Quién lo hizo?».
FUENTE:TELAM/Por Martín Olavarria