La propuesta, que contó con el apoyo de 36 integrantes de distintos bloques, fue aprobada en la Cámara baja y luego en el Senado. Para lograr los dos tercios necesarios, se realizaron intensas negociaciones dentro del peronismo y con un sector de la oposición. Entre los acuerdos alcanzados se destaca la reforma de la carta orgánica del Banco Provincia, la creación de un consejo de directores asociados y la inclusión de nuevos cargos para la oposición en distintos organismos. Además, se creó el Fondo de Fortalecimiento de la Inversión Municipal, que será distribuido entre los 135 municipios y estará sujeto a la colocación de deuda, con una garantía de 250 mil millones de pesos a liquidarse en cinco cuotas en el primer semestre de 2026.

La iniciativa autoriza operaciones por hasta 3.635 millones de dólares, que se estructuran en dos tramos principales. Estos recursos se destinarán al pago de vencimientos en moneda extranjera heredados de la gestión anterior, a la reactivación de la obra pública provincial y a la cobertura de áreas de gestión afectadas por el déficit financiero generado por la caída de transferencias nacionales. En resumen, la aprobación de esta ley de financiamiento permitirá a la provincia de Buenos Aires obtener los recursos necesarios para hacer frente a sus compromisos y reactivar la economía provincial.

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