
Evolución de la alimentación saludableCómo cambió la dieta ideal en los últimos 50 años y qué se recomienda hoy
6 septiembre, 2025
La percepción de una alimentación equilibrada ha evolucionado desde los menús de los años 70 hasta la actualidad, con un enfoque en la variedad, la calidad de los alimentos y la reducción de ultraprocesados.
En los últimos 50 años, el concepto de un plato saludable cambia constantemente. Mientras que décadas atrás se priorizan proteínas y carbohidratos simples, hoy el foco está en la fibra, la calidad de los alimentos y la reducción de ultraprocesados. Expertos como el profesor George Grimble, de la University College London (UCL), y la nutricionista Nichola Ludlam-Raine coinciden en que los cambios reflejan avances científicos y transformaciones culturales.
Actualmente, la nutrición valora los patrones generales de alimentación más que nutrientes aislados. La dieta moderna prioriza alimentos frescos y mínimamente procesados, basada en vegetales, legumbres, cereales integrales y proteínas magras, incluyendo pescado y carnes blancas. La fibra se consolida como un nutriente esencial y se promueve la inclusión de alimentos fermentados como kéfir, chucrut o kimchi, beneficiosos para la salud digestiva y el microbioma intestinal.
El plato saludable actual se distribuye de la siguiente manera:
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½ plato: verduras y frutas variadas.
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¼ plato: carbohidratos almidonados ricos en fibra, como pasta integral, arroz integral y papas con piel.
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¼ plato: proteínas, preferentemente vegetales (frijoles, lentejas, tofu), además de pescado y carnes magras.
Se recomienda sumar una ración de lácteos o alternativas enriquecidas, una pequeña proporción de aceites insaturados (como oliva virgen extra) y agua como bebida principal. Las proporciones ideales para adultos incluyen un máximo de 35% de energía proveniente de grasas (con no más del 11% de saturadas), 10–15% de proteínas y 50% de carbohidratos, con un consumo diario de fibra de 30 g.
La evolución histórica muestra cómo los menús de los años 70 se centraban en carne roja, pan blanco y pocas preocupaciones por grasas o azúcar. En los años 80 se priorizan grasas poliinsaturadas y el pescado azul, mientras que en los 90 surgen los alimentos funcionales y se mantiene la lucha contra el colesterol. Durante los 2000 se incorporan dietas bajas en carbohidratos, con énfasis en cereales integrales y proteínas variadas. En la década de 2010, las dietas basadas en plantas y la fibra ganan protagonismo, y se establecen límites claros para azúcares libres.
Hoy, la alimentación saludable combina tradición y ciencia: prioriza la calidad de los alimentos, la diversidad de nutrientes, la flexibilidad en las elecciones y un enfoque en la sostenibilidad y la salud digestiva.
Fuentes: The Telegraph, Infobae, University College London, Eatwell Plate, expertos en nutrición Nichola Ludlam-Raine y George Grimble.