Sólo en las últimas dos semanas, se conocieron los cierres y/o despidos en las fábricas Dass (Coronel Suárez), Avón (San Fernando) y Dánica (Lomas de Zamora).

La contínua seguidilla de informaciones periodísticas que dan cuenta del cierre de numerosas fábricas en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires, pone en relieve el tremendo impacto que las políticas de apertura indiscriminada de las importaciones que lleva adelante el gobierno nacional, combinada con suba descontrolada de los servicios más caída acelerada del poder de consumo de los sectores populares, tienen en el país en general, y en la provincia de Buenos Aires en particular.
La administración del gobernador Axel Kicillof, en las últimas horas y a través de distintos funcionarios, puso el acento en la preocupación que esto genera, a poco más de un año de iniciada la gestión del actual gobierno nacional.
Según datos publicados por el ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires, Pablo López, el gobierno libertario destruyó unos 54 mil puestos de trabajo bonaerenses durante su primer año. A nivel nacional, ese número alcanza los 130 mil. Las cifras abarcan específicamente al trabajo registrado del sector privado.
El encargado de las finanzas provinciales advirtió que «los sectores más golpeados continúan sin mostrar signos claros de recuperación». Uno de ellos es el de la construcción que «opera en niveles de actividad 30 por ciento inferiores a los de 2023». Solo en este rubro se perdieron 65 mil puestos de trabajo entre noviembre de 2023 y septiembre de 2024 a nivel nacional.
La industria es otro de los sectores de la economía particularmente afectados. «Perdió cerca de 28 mil puestos formales desde que asumió el Gobierno Nacional», indicó el ministro López. Sus declaraciones llegan luego de que se anunciaran despidos en tres plantas muy importantes para la economía bonaerense: Dass (Coronel Suárez), Avón (San Fernando) y Dánica (Lomas de Zamora).
Otro de los rubros que preocupa al gobierno bonaerense es el de hoteles y restaurantes. «De cara a una temporada que no luce nada bien», como lo expresó López, el sector perdió unos 8 mil empleos entre noviembre del 23 y septiembre del 24. En este marco, el funcionario de Kicillof prometió «seguir apoyando a los distintos sectores para recuperar el empleo y la actividad».