Es que el ataque fue atribuido a fuerzas israelíes, y Hamás prometió vengar la muerte de su líder, asegurando en un comunicado que Israel cometió un “error de cálculo” al expandir sus ataques a otros frentes, como es el territorio iraní.
En efecto, desde la televisión estatal de Irán se anunció este viernes que «en las próximas horas, el mundo será testigo de escenas extraordinarias y acontecimientos muy importantes»; lo que se atribuye a una posible intención de ejecutar la “venganza” prometida por Alí Jamenei.
El anuncio sin mayores precisiones hizo saltar todas las alarmas tanto en Israel como en Occidente. Por ejemplo, Estados Unidos informó que desplegará un número adicional de aviones caza y buques de guerra en Oriente Medio y Europa.
El secretario de Defensa Lloyd Austin «ha ordenado ajustes en la postura militar de Estados Unidos diseñados para mejorar la protección de las fuerzas estadounidenses, aumentar el apoyo a la defensa de Israel y garantizar que Estados Unidos esté preparado para responder a diversas contingencias«, dijo la subsecretaria de prensa del Pentágono, Sabrina Singh, en un comunicado.
Es que se teme una escalada de la tensión en la región en el momento más peligroso desde el comienzo de la guerra en Gaza, después de los asesinatos de dirigentes de los grupos radicales islámicos Hamás y Hezbolah en Teherán y Beirut.
Los temores a eventuales represalias por parte de Irán y sus milicias aliadas son concretos e inminentes. En el Pentágono temen que milicias aliadas de Teherán, como los grupos hutíes en Yemen o Kataib Hezbolá en Irak, puedan atacar a las tropas estadounidenses destacadas en la zona, según informan agencias internacionales, sin descartar un eventual ataque masivo contra objetivos de Israel, como Tel Aviv.