En este marco, vale destacar que el curso de Preparación Integral para la Maternidad (PIM) del HMN cumple un rol fundamental para que las mujeres y personas gestantes reciban información basada en evidencia que les permita tomar sus propias decisiones a conciencia. Desde el acompañamiento durante el trabajo de parto hasta las opciones de analgesia y las posiciones de parto, se fomenta el empoderamiento y la autonomía en cada etapa.

Uno de los aspectos centrales de este enfoque es que las mujeres y personas gestantes tienen el derecho de decidir con quién desean estar acompañadas durante su trabajo de parto, parto y puerperio. Esta elección puede tener un impacto significativo en su bienestar emocional y físico, así como en la experiencia global del parto.

Además, las personas gestantes tienen la libertad de elegir en qué posición desean dar a luz a su bebé. Ya sea semisentadas, en posición vertical o en cuadripedia, se reconoce y respeta la diversidad de preferencias y necesidades individuales. En ese sentido, los profesionales de la salud están comprometidos con el acompañamiento respetuoso de embarazos y nacimientos.

Es importante resaltar que todas estas decisiones están respaldadas por evidencia científica. Por ejemplo, se ha demostrado que el acompañamiento durante el parto está asociado con un menor requerimiento de analgesia y mejores resultados tanto para la madre como para el bebé.

Asimismo, también cuentan con evidencia positiva el parto fisiológico y el contacto piel a piel inmediato, los cuales tienen un impacto positivo en el establecimiento de la lactancia materna y el vínculo madre-hijo.

En esta la Semana del Parto Respetado celebremos la atención basada en la evidencia y centrada en las necesidades y deseos de las mujeres y personas gestantes. A través del respeto a sus decisiones y el acceso a información completa y adecuada, contribuimos a experiencias de parto más seguras, satisfactorias y empoderadoras para todas las familias.