Enorme impacto en buena parte de la provincia de Buenos Aires, de una tormenta con pocos antecedentes. El ministro de educación Alberto Sileoni reconoció que no esperan ningún tipo de ayuda del estado nacional. Más de veinte escuelas sufrieron voladuras de techos. Los anegamientos son postal común en los distritos de la zona sur del GBA, en La Plata y en varias ciudades del centro provincial como Azul, 9 de Julio, Tandil, Chacabuco y Chivilcoy, entre otras. La llegada de las lluvias, tan esperada para recuperar lagunas y espejos de agua en el interior bonaerense, se transforma en un calvario en las grandes urbes. Continúa durante todo este miércoles 20 de marzo, el estado de alerta metereológico.

La impactante tormenta que se desató a partir de la primera tarde del  martes 19 de marzo, dejó secuelas y consecuencias de todo tipo en buena parte de la provincia de Buenos Aires. El mal clima persiste en la media mañana de este miércoles 20 de marzo, y los acumulados de agua se incrementan. Todo esto, se suma a una primera quincena de marzo que se presentó con numerosas precipitaciones, largamente por encima de la media histórica.

Lo que es recibido con beneplácito en los sectores rurales y en los numerosos distritos que tienen lagunas que padecen una sequía histórica desde hace un par de años, es en contraposición vivido con zozobra y preocupación en las grandes urbes –en particular la zona sur del GBA y la ciudad de La Plata- donde la intensidad de la tormenta y la enorme cantidad de agua caída en pocos minutos, genera anegamientos e inundaciones numerosas y repetidas.

Además, el temporal –que estuvo acompañado en vastos sectores de intensos vientos y caída de granizo- generó destrozos de todo tipo en localidades como Chivilcoy, 9 de Julio, Chacabuco, Azul, Olavarría y Tandil, entre otras.

A medida que avance la jornada del miércoles 20 de marzo está previsto que la intensidad del fenómeno metereológico vaya disminuyendo. La llegada del buen clima, dará paso a la inevitable respuesta inmediata que el estado –tanto el provincial como los  municipales- deberá dar a los afectados.

EN LA PLATA, FUERTE IMPACTO

Una de las ciudades más afectadas por el importante caudal de agua fue La Plata. En barrios y localidades como Villa Castells, Los Hornos, Ringuelet, Barrio Jardín, Villa Elisa y City Bell, hubo anegamientos y circulación interrumpida. También el casco urbano sufrió la inundación de sus calles, en donde el agua incluso alcanzó la puerta del histórico edificio municipal. Otra de los sitios afectados fue la Autopista Buenos Aires – La Plata, donde las lluvias afectaron a los automovilistas que circulaban.

CLASES SUSPENDIDAS

En numerosos distritos bonaerenses, las clases se suspendieron por razones obvias: anegamientos, destrozos en los edificios, falta de energía eléctrica y por precaución ante la alerta meteorológica que rige para este miércoles. En el interior bonaerense, los establecimientos educativos de Tandil, Olavarría y Azul mantendrán sus puertas cerradas. Lo mismo sucederá en el conurbano bonaerense, donde algunas escuelas de La Plata, Quilmes, Florencio Varela y Lanús suspendieron el dictado de clases por inundaciones y falta de luz.

El ministro de educación bonaerense Alberto Sileoni, confirmó que varias escuelas sufrieron el impacto del temporal: “En estos últimos días tenemos muchas dificultades en las escuelas, con más de 20 techos volados en todo el territorio bonaerense”, señaló el director General de Cultura y Educación.

Sileoni formuló declaraciones en la mañana de este miércoles 20 de marzo a Radio Provincia, en las que expresó que “en estas últimas horas, hay mucha agua entrando en las escuelas, no tanto por los techos sino por las puertas”, y mencionó inconvenientes en “Bragado, 9 de Julio, San Nicolás, San Vicente, Ensenada, Quilmes y muchos barrios de La Plata”.

El funcionario pidió “tener precaución» y recordó que «no es necesario arriesgarse”, así como “estar muy conectados con docentes e instituciones”, al tiempo que advirtió que “muchas familias no pueden salir del barrio”, por lo que “no es solo el problema de la escuela que recibe, sino de las familias y los chicos que llegan”.

LA PROVINCIA NO ESPERA AYUDA DE NACION

En relación a la posibilidad de una colaboración de la secretaría de Educación de la Nación, el ministro de educación provincial Alberto Sileoni recordó que “el 16 de diciembre pasado hubo una tragedia en Bahía Blanca. El Presidente visitó la ciudad al día siguiente y dijo: ‘Ustedes verán cómo se las arreglan’» por lo que subrayó que “no esperamos nada del gobierno nacional y nos arreglamos con lo que tenemos».

“En la Provincia ceden todas las disputas políticas con los intendentes que son de otros partidos políticos. Estamos trabajando con los 135 distritos y vamos a seguir haciéndolo para resolver los problemas de la escuela bonaerense”, cerró.