La noche fue testigo. Más de 90 kilómetros por hora fue la velocidad del viento en Necochea y Quequén, a lo que se sumó una importante lluvia.
El epicentro del temporal fue durante la madrugada, el daño que hizo está reflejado en las calles de Necochea y Quequén.

Caída de ramas, voladura de algunos techos, daños en viviendas, calles anegadas, pesebre destruido en la plaza Dardo Rocha, inmuebles inundados, hasta la bajada del Centro Vasco se vio afectada por el ingreso de agua al salón.
Estas y muchas más fueron las consecuencias que dejó este temporal.

Defensa Civil registró 47 postes caídos, inclinados o quebrados sobre su base, unos 18 techos algunos con voladura parcial y otros total, 31 árboles caídos, 30 casas inundadas y 25 caídas de cables.

Afortunadamente no hubo evacuados ni personas heridas.