DELIBERATIVO DE CHASCOMUSTodo tipo de especulaciones y negociaciones para definir quién será el nuevo presidente del Concejo
27 noviembre, 2023
Transcurrida una semana de la definición de la segunda vuelta presidencial y con Javier Milei abocado a preparar lo que será su futuro gobierno de ajuste y «reforma del Estado» (así lo llama) a partir del 10 de diciembre, muchas son las cosas que están ocurriendo en los distintos niveles. Es que los cambios tanto de autoridades ejecutivas como legislativas deben concretarse no sólo a nivel nacional, sino también en las distintas provincias, y en los cientos de municipios que existen a lo largo y ancho del país.
En Chascomús, mientras el intendente Javier Gastón recorre repetidamente los kilómetros que separan la ciudad de capital provincial para participar de reuniones con el gobernador, buscando como todos sus pares bonaerenses tener un horizonte más o menos claro sobre cómo será el 2024, en el Concejo Deliberante del distrito, los dieciséis concejales se abocan a encaminar la definición de las nuevas autoridades del cuerpo deliberativo.
Tras los resultados del 22 de octubre, en el HCD chascomunense habrá en principio una preeminencia opositora. Es que lo que todavía se llama (¿hasta cuándo?) Juntos por el Cambio tendrá nueve concejales, divididos en dos bloques. Por un lado, el grupo UCR conformado por Andrés Sanucci, Lorena Escaray, Maxi Donato, Valentino Redruello y Rosario Aparicio. Por el otro, en el grupo PRO tallan Ramiro Ferrante, Soledad Nivio, Juan Ehul y Milagros Fusari.
También en el espacio que en las últimas elecciones se presentó bajo el sello de Unión por la Patria, hay dos bloques, con un total de siete ediles. Por un lado el bloque “verde” que agrupa a Leandro Bordalecou, Victoria Figueroa, Oscar Giménez y Julieta Spina (más allá de que podría haber algún corrimiento, por el pase de alguno al Ejecutivo); por el otro, el bloque peronista con Marcelo Teileche, Valeria Macchin y la electa Evelyn Gazzaniga.
Vale señalar que los rumores señalan como probable que Oscar Giménez, concejal electo de UxP, pueda llegar a asumir alguna responsabilidad en el nuevo gabinete del intendente Javier Gastón. En caso de ello concretarse, quien lo reemplazará es el peronista Martín Torres, que viene de ocupar el quinto lugar en la lista durante las últimas elecciones.
NEGOCIACIONES A FULL ENTRE RADICALES Y PRO
Bajo la premisa de poder consensuar “puertas adentro” de la alianza que aún conforman, los cinco concejales radicales y los cuatro ediles PRO intensifican reuniones buscando un nombre que deje a todos conformes.
Ramiro Ferrante quiere hacer pesar sus años acumulados en el recinto, y busca ser otra vez presidente del cuerpo para –imagina- poder volver a pelear en cuatro años por la intendencia. Se le opone Andrés Sanucci, con el argumento –nada desacertado-de ser parte central del armado político que justamente derrotó a Ferrante (y también al desaparecido Gustavo López) en las elecciones primarias recientes, que marcaron el triunfo en la interna de Juntos de la lista encabezada por Santiago Dos Santos.
Paradojas de la política, Ferrante y Sanucci comparten un origen sectorial común desde el que tuvieron su salto y proyección a la política (hace ya algunos años) como fue su coincidencia en la conducción de la Cámara de Comercio años atrás. Comparten también, su condición de comerciantes, y además charlas y buen diálogo mantenido desde hace tiempo. Pero ahora, pensando en el sillón presidencial de calle Mitre, no hay lugar para los dos.
ESCENARIO ABIERTO, CON DIVERSAS POSIBILIDADES
Con los números en la mano, la mayoría natural de los bloques opositores debería encaminar la presidencia en algunas de las direcciones señaladas. Claro que de no existir el consenso que afirman en la UCR y en el PRO buscan de forma denodada por estas horas, podrían tallar otros acuerdos y otros consensos, en este caso -¿por qué no?- con los bloques del oficialismo.
Como se ve, las negociaciones están a la orden del día, y las distintas posibilidades pemiten imaginar diversos escenarios. Lo que es seguro –y tampoco novedoso, porque más de una vez así ocurrió- es que esas “roscas” se mantendrán hasta minutos antes del juramento de las nuevas autoridades.