La reforma de la vigente ley de alquileres fue aprobada en la Cámara de Diputados y girada a la Cámara de Senadores. Entre las modificaciones que se propone introducir a la normativa, se encuentra reducir el plazo de vigencia de los contratos, que dejaría de ser de tres años y volvería a dos años de duración.

En el marco de la primera sesión que se realizó tras las PASO, la oposición  logró conseguir la media sanción de una reforma a la Ley de Alquileres. Del consenso logrado por Juntos por el Cambio no participaron los diputados de la izquierda y tampoco los tres legisladores libertarios.

El proyecto, que fue rechazado por 112 legisladores mayoritariamente oficialistas y pasa ahora al Senado, reduce el plazo de los contratos de 3 a 2 años y establece que la actualización de los montos sea cada cuatro meses en base a un índice pactado entre las partes.

Existían dos dictámenes emitidos por la Comisión de Legislación General hace más de un año: uno, el del oficialismo, y otro, de la oposición, encabezado por JxC.

El dictamen de la mayoría, propuesto por los legisladores referenciados por Unión por la Patria, fue rechazado con 109 votos afirmativos y 131 negativos. Posteriormente, se votó el dictamen de minoría, iniciativa de autoría de Juntos por el Cambio, que fue aprobado por 125 a favor y 112 en contra.

La coalición opositora consiguió que avance su propuesta con los votos de sus diputados, junto al apoyo de los legisladores de Córdoba Federal, Identidad Bonaerense, el interbloque Provincias Unidas y el bloque SER. El Frente de Todos, el Frente de izquierda y también La Libertad Avanza votaron en contra.