La fábrica, estatal y proveedora del Estado, pertenece a la Dirección General de Cultura y Educación y depende específicamente de la Subsecretaría de Infraestructura Escolar.
Tras la puesta en valor de sus talleres, la planta ya tiene a sus 150 trabajadoras y trabajadores produciendo mesas y sillas y lleva entregado mobiliario para 50 escuelas bonaerenses.
Desde Provincia contaron a través de un comunicado que “la reactivación de la fábrica incluyó también un cambio en el modelo de los muebles, que mejoró la durabilidad y el confort”.
“Los asientos de plástico polímero se reemplazaron por madera laminada con forma ergonómica. Con una menor posibilidad de hundirse, doblarse o rajarse, se estima que la nueva forma de producción disminuirá el porcentaje de rotura del mobiliario de cada escuela”, agregaron.
¿Cómo se produce?
La fabricación de mobiliario escolar por parte del Estado provincial comienza en una de sus plantas donde se cortan las grandes tablas que se utilizarán en los respaldos, asientos y tapas de las mesas.
Luego, las pequeñas partes de madera son trasladas a la planta principal ubicada en las calles 520 y 29. En ese lugar los profesionales de la herrería “procesan paquetes de caños de acero de seis metros de largo y más de una tonelada de peso”.
Después las piezas son trasladas al área de soldadura donde utilizan moldes para la finalización de las estructuras. “El mueble se cuelga e ingresa en un gran sistema de rieles, pasa por una batea de desengrase que le quita la suciedad, luego a la segunda batea de enjuague y, por último, a la de sellado y secado”, contaron desde Provincia.
Y detallaron: “El procedimiento se realiza a lo largo de más de 30 metros de extensión, coordinado pero sin pausa, lo que permite fabricar por día el mobiliario para seis aulas que son distribuidas a escuelas en todo el territorio bonaerense”. (DIB) MT