Modernidad conjugada con tradiciones, aromas plenos de tamales, empanadas y locros, sonidos del canto de los pájaros entremezclados con chacareras y zambas, junto a la calidez de sus aguas termales. Sensaciones con las que la provincia recibe, ahora sin restricciones, a quienes la visitan.

Inicialmente catalogada como un destino termal, la diversificación de las actividades y el afianzamiento de una creciente oferta hotelera, gastronómica y una excelente conectividad, hacen hoy de Santiago del Estero uno de los principales centros turísticos argentinos.

Tanto la capital provincial como las Termas de Río Hondo -sus dos principales puntos receptivos-, es evidente la inversión en infraestructura: el Estadio Único, el Tren al Desarrollo -que une ambas ciudades-, el Autódromo -que alberga un importante museo- y un hotel provincial de 4 estrellas, en Río Hondo, son muestra de ello.

Con precios para todos los bolsillos, la disponibilidad de alojamiento es variada en ambos destinos: desde campings económicos hasta hoteles de máximo categoría, pasando por su amplia oferta gastronómica.

Modernidad y espíritu religioso es lo primero que se percibe al llegar a la capital santiagueña. Diseños futuristas como el de la Terminal de Ómnibus dan paso a un sinnúmero de iglesias y capillas, entre las que se destacan la Catedral -frente a la Plaza Libertad-, el templo de Santo Domingo y el de La Merced, la iglesia de San Francisco -con su Museo de Arte Sacro-, y la capilla La Montonera, todas con visitas guiadas gratuitas.

Nacida como enclave de bienestar de las comunidades Incas, Termas de Río Hondo evolucionó hasta convertirse en una ciudad donde el deporte, la diversión, la cultura y la salud forman parte de su abanico de atractivos.

Algunos alojamientos cuentan como valor agregado espacios destinados al bienestar donde se aplican baños de barro y otras prácticas de relajación.

El Autódromo de Termas es sede de importantes competencias internacionales, como el Moto GP, el campeonato de motociclismo más importante del mundo que, previo a la pandemia, supo atraer turistas desde Brasil, Chile, Bolivia, Colombia, y Ecuador.

Muy enfocada en el deporte, su Campo de Golf, el primero público a nivel internacional, es sede anual del torneo PGA Tour Latinoamérica.

El espejo de agua del Embalse del Río Hondo también es escenario de diversas actividades, desde tranquilas caminatas con atardeceres mágicos hasta competencias náuticas a vela y motor.

Las tarifas de hoteles, albergues y campings se acomodan a todo tipo de presupuestos, desde el alquiler de un simple cuarto hasta el “todo incluido” de un hotel 5 estrellas.

Para la primera quincena de enero puede conseguirse en Río Hondo una habitación doble de hotel 5 estrellas con pensión completa por $ 19.300 diarios. Esto incluye gimnasio, sauna, piscina cubierta, estacionamiento y acceso al casino, además del servicio de comidas.

En el otro extremo, hay cabañas y aparts con precios entre los $ 3.400 y $ 5.400 diarios, según se trate de hospedajes de 2 ó 3 estrellas.Posee, además, una media docena de campings en cercanías del Embalse, muchos más económicos aún.

Existen en la ciudad un total de 19.000 plazas, distribuidas en alrededor de 170 establecimientos hoteleros y departamentos.

En el caso de la capital provincial, la oferta actual está compuesta por hoteles de hasta 4 estrellas.

Para las dos primeras semanas del año, se ofrecen habitaciones para dos personas desde $ 2.900 diarios en hospedaje de 2 estrellas, hasta $ 3.400 en el caso de los 3 estrellas y algunos departamentos de alquiler temporario.

Sobre estos valores se deberá tener en cuenta el descuento que se ofrece a través del Programa PreViaje.

Recientemente inaugurado, el hotel Hilton Garden Inn aporta a la Madre de Ciudades un establecimiento 4 estrellas preparado para la realización de convenciones de todo tipo, una oferta será mejorada en 2022, ya que la cadenaNH Hotel Groupanunció la apertura de otro establecimiento de similares características.

Las empanadas se han ganado un lugar destacado dentro de la gastronomía nacional. Son jugosas, de carne y su condimento principal es el comino; se cocinan en horno de barro o se fríen en grasa. Es un pecado ir a Santiago y no probarlas.

A la hora de los postres, se hacen presentes el arrope de chañar, la pulpa de algarroba, las empanadillas, los moroncitos, el bolanchao y la tuna, el postre santiagueño por excelencia.

Existe, tanto en Termas como en Santiago, un gran abanico de locales gastronómicos, desde puestos callejeros de comidas rápidas hasta restaurantes de cocina internacional, fusión y regional.

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Cabalgatas, paseos en sulky, en bicicleta y a pie hacia restos arqueológicos esperan al viajero en esta villa ubicada a 86 kilómetros de Santiago y a 105 de Río Hondo. En un trayecto de 54 kilómetros sorprenden tres capillas antiguas.

Situada en Puesto del Medio, (Ruta 9 sur, kilómetro 111,5), posee sembradíos de ceibos y quebrachos blancos, materias primas para la construcción del requerido bombo legüero santiagueño.

Un encuentro con la naturaleza, la historia y la cultura. Desde el kilómetro 37 de la Ruta 5, propone recorrer un sendero ecológico, lanzarse por una tirolesa de 120 metros, visitar un museo, pasear en sulky, disfrutar de una merienda campestre y llevarse como recuerdo una foto con vestimenta gauchesca, además de productos regionales.

En Mailín, a 148 kilómetros de la capital, se celebra, en el Día de la Ascensión, la Fiesta del Señor de los Milagros, una de los actos religiosos más convocantes del norte argentino.

Cada 23 de noviembre se festeja en Sumampa el Día de Nuestra Señora de la Consolación, Las actividades se realizan desde los nueve días previos a la fecha.

La Fiesta de San Esteban, expresión cristiano-pagana, se hace en Maco y Sumamao el 26 de diciembre, con una procesión previa de 40 kilómetros. Como parte de las celebraciones se realiza la Carreras de los Indios y un fin de fiesta con cantos y bailes.

El 10 de diciembre, se rinde culto en Loreto a la Virgen Morena. La iglesia elige un tema distinto cada año.

A partir del 12 de octubre pasado, la provincia eliminó todas las restricciones que imponía frente a la pandemia para los viajeros procedentes desde algunos distritos del país.Por lo tanto, quienes arriben a cualquiera de los destinos turísticos de la provincia no necesitarán presentar test ni certificados de ningún tipo, aunque se deberán tomar los recaudos mínimos, como el uso de barbijos.