El mandatario bonaerense formuló esas declaraciones al encabezar en La Plata un acto en el que se firmaron 37 convenios para la construcción de 1.200 viviendas en 35 municipios.

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, afirmó este jueves que en los próximos años su administración hará «historia en términos del acceso a la tierra y a la vivienda».

El mandatario bonaerense formuló esas declaraciones al encabezar en La Plata un acto en el que se firmaron 37 convenios para la construcción de 1.200 viviendas en 35 municipios.

Acompañado por el ministro de Infraestructura, Agustín Simone, Kicillof firmó convenios con intendentes para la construcción de nuevas viviendas y la reactivación de obras que estaban paralizadas por un presupuesto total de 5.100.000 de pesos.

Del acto, que se desarrolló en la Casa de Gobierno, participaron los jefes comunales Julio César Marini (Benito Juárez), María Cecilia Gianini (Carlos Tejedor), Francisco José Echarren (Castelli), Erica Revilla (General Arenales), Esteban Santoro (General Madariaga), Pablo Javier Zurro (Pehuajó), Mayra Mendoza (Quilmes) y Roberto Álvarez (Tres Lomas).

El gobernador recordó que, durante los cuatro años en que gobernó María Eugenia Vidal, se construyeron 8.000 viviendas y lo contrastó con su primer año a cargo del Ejectuivo porteño, cuando, aún «en medio de una pandemia» se hicieron más de mil.

«Si con pandemia hicimos más viviendas que en una etapa con condiciones más favorables, reactivamos obras e iniciamos nuevas, en tres años vamos a hacer historia en términos del acceso a la tierra y vivienda en la provincia»

«Nos encontramos con 5.000 viviendas que se habían anunciado, muchas se habían iniciado, pero luego se suspendieron y se paralizaron. La decisión que tomó este gobierno fue terminarlas, estén en municipios oficialistas o de la oposición, porque son para los bonaerenses», añadió.

Planteó que «esta no era una tarea sencilla porque había contextos interrumpidos con empresas y deudas que pagar para reactivar las obras» y destacó que pese a ese escenario, su administración resolvió «una por una estas cuestiones y en vez de dejarlas como esqueletos sin vida», se decidió «terminarlas».

El mandatario analizó que tanto en el conurbano como en el interior existe una gran demanda de viviendas debido a que «hay un grave problema con el acceso a la tierra urbana y hubo falta de políticas públicas de planificación, regulación y uso del suelo».

«Esa falta de Estado, de política de fomento a la vivienda, de créditos para acceder, de planes y ausencia de tierra disponible generaron la proliferación de asentamientos, barrios precarios, villas y tomas», describió.

Consideró que la proliferación de barrios privados también ocurrió como «producto de la falta de planificación» y advirtió que «terminaron produciéndose edificaciones al costado de la reglamentación».

Kicillof dijo que tanto «para sectores más favorecidos como para los más vulnerables, el uso de la tierra terminó siendo un problema, con construcciones que no están a la norma y carecen de servicios básicos que terminan en hacinamiento y tragedia».

Sostuvo que su Gobierno trabaja para «empezar a poner en norma todo lo que hizo fuera de norma», consideró que «para barrios privados esta política está siendo efectiva» ya que se impulsa que «todos aquellos que puedan demostrar que tienen la intención de hacer las contribuciones que marca la ley y ponerse en norma, lo hagan».

«La provincia requiere que se avance en términos de trabajo, de inversión y de inclusión para ponerla definitivamente en marcha»

Manifestó que ello redundará en un beneficio para los vecinos que «hoy no pueden tener título de propiedad» y opinó que la provincia «requiere que se avance en términos de trabajo, de inversión y de inclusión para ponerla definitivamente en marcha».

El Gobernador destacó la importancia de “poner en marcha la actividad” y dijo que cada vivienda “genera 4 empleos de tiempo completo más otros tantos puestos de trabajo indirectos”.

En ese sentido, Simone dijo a Télam que su área trabaja «para reactivar la cantidad de viviendas paralizadas hace 4 años e iniciar un proceso de construcción de casas nuevas con una inversión total de 5.000 millones de pesos en plazos de 12 o 18 meses».

Aseveró que ello «genera esperanza a los ciudadanos y, a la vez, cada casa genera cuatro puestos de trabajo directos y otros cuatro indirectos, lo cual moviliza la actividad económica».

«El objetivo es llegar a 10.000 viviendas: esta es la primera tanda y este año iniciaremos 7.000 más», graficó.

Luego planteó que ya se reactivaron las obras de 2.300 viviendas, dijo que se concluyeron en 2020 un total de 1.078 y adelantó que se trabaja «para reactivar 1.800 más».